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Firmas vitivinícolas de Parras compiten por el mercado

Inicia el proceso. Después de recolectar la uva de los viñedos se deposita en la tolva y se lleva a la despalilladora, la cual logra quitar la uva del ramo sin dañarlo.

Inicia el proceso. Después de recolectar la uva de los viñedos se deposita en la tolva y se lleva a la despalilladora, la cual logra quitar la uva del ramo sin dañarlo.

VIRGINIA HERNÁNDEZ

Valle de Parras ha mostrado desde hace 416 años su vocación natural vitivinícola en América. Sin lugar a dudas, hablar del vino en el Continente Americano o en México nos obliga indiscutiblemente a todos a remontarnos a la historia del Valle de Parras, a 1597, año en donde se dio a uno de los pobladores originales, don Lorenzo García, una dotación de tierras por parte del Rey Felipe II para plantar viñas y producir vino y brandy.

A partir de esa fecha y hasta nuestros días, el cultivo de viñas y la producción de vinos generosos y de mesa es una gran tradición familiar en Parras, pero también ha sido una gran oportunidad para que algunas marcas sobresalgan y se abran camino en el mercado de vinos en México y a nivel internacional.

Hasta el día de hoy, la producción artesanal se continúa dando en un gran número de hogares de Parras. Sin embargo, las firmas de Parras que están destacando a nivel nacional y que están afiliadas al Consejo Mexicano Vitivinícola son: Casa Madero, heredera de esta gran tradición desde 1597, y Bodegas Rivero González, una firma joven, pero que ha redoblado el paso y ha logrado un crecimiento importante gracias a las inversiones y a la calidad de sus productos.

 CAMINAN A PASO ACELERADO

Bodega Rivero González nace en el Valle de Parras y es una marca de vinos de reciente creación dentro del mercado. Nace en 1998 y a sus 15 años de operaciones está logrando abrirse camino dentro del mercado con sus vinos blancos, tintos y rosados.

La familia Rivero González decidió iniciarse en la producción de vino precisamente en Parras por el gran amor que Juan Antonio Rivero Larrea le tiene a esta ciudad, por lo que la familia decidió que Parras era el mejor lugar para producir vinos de mesa de calidad.

El sueño inició con tan sólo dos hectáreas. Actualmente se cuenta con 20 hectáreas de viñedos de donde se obtiene la vid necesaria para la elaboración de vinos de mesa. En 2007 lograron tener una bodega con tecnología de punta italiana y alemana en donde fabricamos todos los vinos, cuidando durante todo el proceso la calidad del vino.

María Rivero González, directora comercial de Bodega Rivero González, es hija del fundador de esta firma vitivinícola, quien reconoce que la marca Rivero González es nueva, pero que ha logrado un fuerte crecimiento en producción, bodegas, tecnificación y venta en el exterior.

La directiva destacó que el buen momento por el que atraviesa el vino mexicano también está relacionado con la calidad de los vinos que se producen en México, pero también a la buena labor realizada en conjunto con el Consejo Mexicano Vitivinícola.

Citó que en los dos últimos años las empresas del ramo han recibido apoyos por parte del Gobierno federal, a través de Sagarpa, para realizar inversiones en bodegas y en la compra de equipo con tecnología de punta, buscando mejorar los procesos, pero sobre todo mejorar la calidad del vino.

Informó que gracias a la firma de convenios con el Gobierno se han recibido apoyos a través del Programa para Impulsar la Competitividad del Sector Industrial Vitivinícola (Proviti), lo cual facilitó la modernización de viñedos con la compra de equipos, barricas, realizar estudios de consultoría comercial y marketing.

Destacó María Rivero que "las inversiones hechas han generado un círculo virtuoso para que los consumidores opten por los vinos mexicanos. "El tener un consumidor sofisticado incrementa la demanda de vinos en México".

En este 2013 se tienen cinco bodegas, sin embargo, para 2014 se tendrán siete. Con 20 hectáreas de cultivo de vid se estima producir entre 50 mil a 60 mil botellas de vino al año, algo así como 5 mil cajas anuales. De acuerdo a la directiva, se opera al 70 por ciento de su capacidad instalada los viñedos.

Desde hace dos años Bodega Rivero González comenzó a exportar sus vinos de mesa a Estados Unidos, particularmente a San Francisco y Nueva York. "Me ha impactado lo rápido que ha avanzado el vino mexicano en el mercado de EU. Muchos no saben de lo que se habla, pero lo compran por su calidad".

Sin precisar las cifras que se exportan, se reconoce que la mayor parte de su producción se dirige al mercado nacional. María Rivero confesó que aún no tiene una fuerte participación dentro del mercado nacional, pero destacó que "trabajamos con fuerza para incrementar en el consumidor el gusto por el vino nacional y por los vinos de nuestra marca".

La directiva comentó que el 17 por ciento de la población en México que consume vino, en su mayoría lo hace en restaurantes.

Precisó que es importante que las personas tengan conocimiento de que detrás de una botella de vino están 15 empleos directos y 80 indirectos. "En el caso de Rivero González se generan 50 empleos en el cultivo de la vid".

 CASA MADERO, UN VINO CON GRAN HISTORIA

Casa Madero es la empresa vitivinícola más antigua de América y una de las más antiguas del mundo aún en operación. Los orígenes de esta empresa y sus Bodegas de San Lorenzo se remontan al 15 de agosto de 1597, fecha en que don Lorenzo García tomó posesión de "Las Mercedes" o Títulos de Propiedad que Felipe II, Rey de España, le otorgara sobre diversos terrenos y manantiales de agua en los que con anterioridad había sentado sus reales e iniciado la plantación de vides. En dichas Mercedes se le confirma la autorización de plantar vid y de elaborar vino y aguardiente de uva (brandy).

A partir de esa fecha se dan muchos cambios y el 12 de abril de 1893 don Evaristo Madero compra la Hacienda de San Lorenzo a descendientes de Leonardo Zuloaga y Luisa Ibarra. A la fecha la familia continúa al frente del negocio atendiendo grandes retos dentro del mercado y compitiendo a nivel internacional.

Brandon y Daniel Milmo, director de operaciones y director comercial de Casa Madero, respectivamente, afirmaron que hay una gran responsabilidad y un gran orgullo el ser de Casa Madero, sobre todo por la historia de más de 400 años que tiene la firma vitivinícola en el sector y en el Continente Americano.

Daniel Milmo declaró que "es un gran reto. Tenemos la responsabilidad de que este negocio siga adelante y tenga éxito, que no tenga problemas, no es nada fácil".

Añadió que tampoco es una tarea sencilla el mantener las tradiciones y a la vez modernizar los procesos para ser competitivos y mejorar la calidad.

Expresó que para él "beber un vino de Casa Madero es beber historia, ya casi cumplimos el aniversario 416".

Actualmente se tienen 300 hectáreas de viñedos, sin embargo, ante el buen panorama de un aumento en el consumo de vino en México, sobre todo de marcas nacionales, se tienen planes en los siguientes cuatro años de sumar 100 hectáreas más, es decir, un total de 400. Se generan al día de hoy 300 empleos en todas las áreas y una producción estimada de 2 mil toneladas de uva anuales.

 CALIDAD Y PREMIOS INTERNACIONALES

Brandon Milmo dijo que gracias al esfuerzo que se realiza desde el viñedo se ha logrado mejorar la calidad del vino desde hace varios años atrás. A lo anterior hay que sumar que se han sabido ganar la confianza del consumidor al participar en concursos internacionales, compitiendo con las firmas más importantes del mundo y ganando 455 medallas a la fecha.

"Esto hace que los vinos tengan un aval de calidad, dicho por terceras personas, expertos en la materia que evalúan de manera subjetiva".

Dijo que en estas competencias se hace una evaluación a ciegas a todas las muestras, sin saber si son de cierta marca de vinos de Francia o México.

"Nosotros somos la vitivinícola mexicana más premiada a nivel nacional y se tienen al día de hoy 455 medallas acumuladas. En 2013 se obtienen 35 medallas".

Un ejemplo de ello es un premio muy importante que ganaron en abril de este año en París, Francia, gracias a su chenin blanc, el cual fue el mejor vino blanco seco de todas las categorías del concurso, algo que dijo "es la primera vez que una firma mexicana vitivinícola recibe un premio de este calibre". Desde 1989 a la fecha Casa Madero comenzó a concursar a nivel internacional.

En el año 2000, Casa Madero destinaba el 95 por ciento de la producción a la exportación a 27 países. Hoy en día están enfocados al mercado nacional y sólo exportan el 5 por ciento de la producción a EU, Europa y Japón.

Por ello, Daniel Milmo indicó que son la marca más importante de vinos de mesa dentro del mercado nacional, aunque no precisó el porcentaje. "Trabajamos día a día para que nos elijan".

Mencionó que al comprar una botella de vino mexicano las personas deben considerar que se está apoyando a las familias mexicanas, ya que muchas personas dependen del campo y hay mucha mano de obra detrás. Indicó que al comprar vinos importados se está ayudando a las familias argentinas o chilenas, y no a las mexicanas.

El director comercial destacó que se tienen buenos vinos mexicanos, con una buena relación de calidad precio, por lo que consideró que no le piden nada a un vino de cualquier parte del mundo.

A la espera de que el mercado del vino se duplique, Brandon Milmo indicó que en los siguientes años incrementarán las inversiones en viñedos y bodegas.

20 HECTÁREAS De viñedos tiene la firma de vinos Rivero González
300 HECTÁREAS de viñedos cuenta actualmente Casa Madero
15 EMPLEOS Directos se generan al producir una botella de vino
Nosotros somos la vitivinícola mexicana más premiada a nivel nacional y se tienen al día de hoy 455 medallas acumuladas— BRANDON MILMO, Director de operaciones de Casa Madero
Las inversiones hechas han generado un círculo virtuoso para que los consumidores opten por los vinos mexicanos— MARÍA RIVERO GONZÁLEZ, Directora comercial de Rivero González

Proceso de producción del vino

1.- Se coloca la uva para su fermentación y se obtiene el mosto con cáscara, obteniendo la pulpa y el jugo fermentado de la uva, el cual se envía a un tanque de fermentación.

3.-En los tanques de acero inoxidable se almacena el jugo fermentado para lograr la calidad adecuada para elaborar el vino deseado.

5.-En el laboratorio, los expertos hacen diversas pruebas de calidad sobre la acidez, grado de alcohol, entre otros, del vino.

2.-Se hace la separación del ramo de uva y se utiliza después como composta.

4.-A una temperatura de 20 grados se deja reposar en barricas de madera (roble) para obtener vinos tintos de alta calidad.

6.-Para concluir, el vino se pasa al área de embotellado y el color de la botella se determina en función si es un vino tinto, blanco o rosado.

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Escrito en: Parras de la Fuente vino

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