El secretario general del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Alejandro Sánchez Camacho, descartó que el fondo de capitalidad para el Distrito Federal y la reforma político-electoral se puedan utilizar como “moneda de cambio” para avalar la reforma energética.
En un comunicado, el líder perredista calificó como inaceptable que se pretenda condicionar la aprobación de una reforma en la que su partido no está de acuerdo por los derechos y las necesidades que tiene la ciudad.
Durante una gira por Monterrey, Nuevo León, consideró que el dictamen de reforma hacendaria no es satisfactorio, pues existen temas pendientes que deben revisarse para que quede fuera el contenido en el tema energético.
Terminar con la evasión fiscal, planteó, debe ser una determinación efectiva y no una simulación, además de que se debe revisar el impuesto de 7.5 por ciento que se plantea a las ganancias de las mineras.
Indicó que los legisladores de su partido insistirán en esos temas y rechazó el cabildeo, pues dijo que los representantes populares son resultado de una votación ciudadana, por lo que no pueden negociar con representantes de las grandes empresas.
En otro tema, Sánchez Camacho informó que el PRD analiza posponer su congreso nacional programado para los primeros días de noviembre, hasta la tercera semana de ese mes, entre el 21 y 24, a fin de estar atentos al debate de la reforma energética y evitar que se imponga.