El político y la fiesta brava
En la práctica un político ejerce su profesión toreando los embistes de la problemática, y entre más hábil sea para eludir responsabilidades, y salir airoso, pues es mejor político.
La ley de atención a víctimas del delito constituye una extraordinaria faena comparable tal vez a una “Verónica de Manolete”, hecha a toda la sociedad mexicana que embestida por el crimen es atropellada por la impunidad y ahora es burlada con esta ley.
En vez de reducir la impunidad que oscila en el noventa y cinco por ciento y que se castigue a los victimarios; se sacan de la manga una ley para darle algunas palmadas a las víctimas a cambio de la justicia que demandan.
Y lo increíble, todavía arrancan aplausos del respetable público y como buenos toreros hasta vuelta al ruedo, qué bárbaros ésos sí que son buenos “Toreros” digo Políticos.
El sistema es tan hábil que absorbió en su protagonismo al señor Sicilia, a la señora Miranda y al señor Martí; que son personas valientes y que llevaron su indignación y su lucha a niveles heroicos. Por lo que arrastraron muchas personas y simpatizantes para presionar y exigir justicia.
Les dieron mucha cobertura los medios y los políticos se colgaron con habilidad de su dolor, se les dio reflectores y ceremonias, ya nomás faltó entregarles medallas protocolarias.
Y ellos pues como “palo dado ni Dios lo quita” y nadie les iba regresar a sus hijos pues se dejaron querer y fueron seducidos por el maléfico vértigo que producen los reflectores y el protagonismo.
¿Y qué se obtuvo? Pues otra secretaría que engordará la inútil burocracia, pero lo más interesante: se abrirá otra cuenta de esas que no tienen fondo, para dirigir recursos difíciles de auditar. Porque si hay algo abundante en esta nación son víctimas y como la ley contempla resarcir todo tipo de daños directos y colaterales pues vaya usted a imaginarse “qué chulada de caja chica” estrenará este gobierno para acuchillar el presupuesto.
Ahora esperaremos próximamente otra secretaría que dará atención a las víctimas del delito que luego fueron víctimas de la ley de atención a víctimas, y que no recibieron la reparación psicológica y patrimonial que fue ofrecida por esta ley de víctimas. Así pues viva México señores y sigamos coreando ¡Torero! ¡Torero!...
Arturo P. Salas Juárez,
Torreón, Coahuila.
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‘Vuelve el tiradero al vado’
Otra vez vuelve el tiradero en el vado, pues los carromatos continúan tirando escombro y toda clase de basura en el vado por la carretera del bulevar Río Nazas, bajo el puente plateado, tanto del lado de Torreón, como del lado de Gómez Palacio, por lo que demandamos a los departamentos de Ecología de los dos ayuntamientos, propongan alguna solución para que este tipo de trabajo de los señores con carromato, deje de afear nuestras ciudades.
Laura Sánchez,
Torreón, Coahuila.