Reformas y Reformas
“Las escenas se repiten, reformas van y vienen, tras una reforma otra, y todo reforma el hombre y el hombre nada reforma”: Antonio Plaza.
Desde hace algunos años, muchos especialistas en materia social y sobre todo política, tanto escritores como analistas, columnistas y hasta políticos, se han dado a la tarea de analizar y en todo caso a criticar el desempeño que han tenido los gobiernos, empezando con el de Miguel de la Madrid, hasta el actual Gobierno federal.
Indudablemente que existen razones más que válidas, para considerar que las decisiones a reformas tanto a leyes, reglamentaciones y a la constitución han servido únicamente para favorecer intereses transnacionales y neoliberales, a quienes no les importa el efecto devastador que provoca a la población más desprotegida con tal de adquirir más ganancias y poder.
Tales reformas y decretos tanto de gobiernos priistas como panistas sobre todo en los sexenios de Salinas, Zedillo, Fox y Calderón, afectaron enormemente al país, si no, diga usted en qué se benefició México y su población, cuándo?
Los bancos mexicanos, controlados y administrados por el gobierno federal, fueron privatizados y rematados, como si fuera venta de cochera a socios y amigos del ejecutivo.
Diga usted, en qué nos benefició que posteriormente estos pseudobanqueros, sacando el dinero del país se declaran en quiebra y el gobierno todavía les apoya con el dinero del pueblo, lo que trajo como consecuencia una deuda que todavía estamos pagando con el mal llamado Fobaproa.
Para acabarla de arruinar el gobierno extranjeriza los bancos a España y Gran Bretaña entre otros, en su afán de obtener dinero, que en ningún país obtendrían, se convierten en nada menos que reales agiotistas.
Diga usted si la venta de bancos, aseguradoras, Teléfonos de México, mineras, Guanos y Fertilizantes de México, Ferrocarriles, Aviación y demás, trajeron un beneficio que se haya sentido en el bolsillo de los mexicanos.
Existe una inconformidad manifiesta de voces acreditadas y de la población en general que las reformas no han sido convenientes, que el gobierno en turno -quien ya aprobó la reforma laboral- perjudicó a los trabajadores y benefició al patrón, así como la reforma de telecomunicaciones, donde le da a las televisoras el poder de ampararse y seguir con el monopolio, no debería seguir promoviendo las reformas como la energética, que concede a los extranjeros tengan parte de nuestros recursos, en lugar de establecer refinerías, pues existe dinero suficiente en el fondo que se tiene de aproximadamente 193 mil millones de dólares.
Asimismo evitar la reforma de aplicar el IVA a alimentos y medicinas, en lugar de estar dando dinero a programas que son sólo paliativos que sólo favorecen a partidos políticos con fines electorales, mejor se utilice en proyectos productivos que ayuden a los más vulnerables.
Feliciano Hernández Galarza,
Ciudad Lerdo, Durango.