El exfutbolista brasileño ‘Pelé’ posa durante la inauguración de un reloj con el conteo regresivo para el comienzo del mundial Brasil 2014. (EFE)
Brasilia, una ciudad construida desde la primera piedra e inaugurada en 1960 como nueva capital del país, se sumergió en un inusual ambiente de futbol con la llegada de las selecciones de Brasil y Japón, que el sábado inaugurarán la Copa Confederaciones.
La ciudad surgida de los tableros de los arquitectos Lucio Costa y Óscar Niemeyer le dio una muy fría recepción a ambas selecciones, incluso a la brasileña y a su estrella Neymar, que suele desatar pasiones por donde pasa, aunque hoy no fue así en la capital política de su país.
Los japoneses fueron directamente desde el aeropuerto hacia su hotel, donde les recibieron unos pocos nipones residentes en Brasilia que, muy serios y silenciosos, extendieron carteles de bienvenida con frases escritas en su idioma, en inglés y en portugués, en las que se leía "Fuerza Samurai Blue", como se conoce a su selección.
Aunque desembarcaron procedentes de Doha, los japoneses no tendrán mucho tiempo para descansar, pues su entrenador, el italiano Alberto Zaccheroni, ha programado su primer entrenamiento para esta misma tarde.
La selección brasileña, por su parte, llegó desde la ciudad de Goiania, a unos 200 kilómetros, y optó por recluirse, a la espera de constatar este día el estado del césped del estadio Nacional Mané Garrincha, donde el sábado se enfrentará a Japón.
Frente al hotel en que se hospedan en Brasilia también se reunió un pequeño grupo de aficionados, más bulliciosos que los japoneses pero que ni pudo ver a los jugadores, escondidos atrás de los vidrios oscuros del autobús que los trasladó desde el aeropuerto.
Aunque la llegada de las selecciones casi no movilizó a los aficionados locales, Brasilia ha intentado adoptar un cierto clima de futbol, artificial y ajeno a una ciudad que no cuenta con ningún club en primera división y que tiene un marcado talante burocrático.
En ese esfuerzo, se han desplegado carteles alusivos a la Copa Confederaciones en 15,000 postes de iluminación y adornado con banderas de los países participantes diversos sitios de la ciudad.
Asimismo, cumpliendo determinaciones de la FIFA, se instalaron unas 600 placas de señalización escritas en portugués e inglés que, en su mayoría, indican la dirección del estadio y han generado más de una polémica y muchas risas.
A un año de la justa mundial
FIFA y Pelé inauguran reloj en Río de Janeiro
* Un gigante reloj marca a partir de ayer en la playa de Copacabana en Río de Janeiro los días, horas y segundos que quedan para el puntapié inicial del Mundial del 2014 en Brasil.
* El 12 de junio de 2014 la selección brasileña saldrá al césped para disputar el primer partido del Mundial en Sao Paulo, ante un rival que conocerá en diciembre próximo.