A algunos legisladores de estados fronterizos les ha salido caro su voto en favor del alza al IVA en entidades del norte y sur del País.
Tras aprobar el incremento del 11 al 16 por ciento en el IVA en estados fronterizos, senadores y diputados han sido blanco de agresiones y campañas en su contra.
Un ejemplo es la senadora del PRI por Chihuahua, Lilia Merodio, quien ayer aprovechó que el Presidente Enrique Peña acudió al Senado y le pidió garantías de seguridad.
Luego de la ceremonia en la que se entregó la medalla Belisario Domínguez, Merodio buscó a Peña para expresarle su preocupación por la "campaña de odio" que se ha desatado contra los priistas que apoyaron el aumento de impuestos.
Las oficinas que Merodio tiene en Ciudad Juárez fueron apedreadas el fin de semana.
"Por supuesto que temo por mi seguridad, lo he hecho del conocimiento del Secretario de Hacienda y del propio Presidente de la República", expresó la senadora.
"Son campañas dirigidas, son grupos del PAN los que están haciendo estas campañas de odio, no solamente en Juárez, sino en toda la frontera".
Merodio aseguró que, previamente, un grupo de personas había colocado pancartas y hasta hackeado sus cuentas de Facebook y Twitter.
Informó que las autoridades ya iniciaron una investigación sobre los hechos, pero adelantó que todo apunta a que los incitadores son integrantes del Partido Acción Nacional (PAN), tal como lo denunció el pasado lunes, el coordinador de los diputados del PRD, Silvano Aureoles.
En Baja California circulan volantes y se montaron anuncios espectaculares en los que se exhiben las fotos y se acusa de "traicioneros" a los diputados de la entidad que votaron por el IVA.
En Chihuahua circulan carteles también con fotos de legisladores priistas que avalaron el gravamen.
Cuestionado sobre estas agresiones, el Secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, anunció que sí se contemplan mecanismos para apoyar a los legisladores.
El coordinador del PRI en el Senado, Emilio Gamboa, aseguró que ya se investiga el origen de las agresiones, se pronunció por frenar las acciones de violencia y advirtió que no darán marcha atrás en ninguna de las reformas aprobadas.
Por su parte, el coordinador del PAN en el Senado, Jorge Luis Preciado, descartó que los militantes de su partido puedan estar involucrados en los hechos y afirmó que los panistas decidieron dar el debate y oponerse públicamente a la reforma, pero no avalan el uso de la violencia.
