Los requisitos para ingresar al programa, básicamente son que el menor tenga un peso mínimo de un kilo 250 gramos y que se encuentre en condiciones estables para que el médico apruebe su incorporación. ARCHIVO
El Hospital de Ginecobstricia del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco es pionero en la implementación del Programa de Atención Mamá Canguro, siendo el primer nosocomio en operar este modelo humanizado de atención.
Así lo señaló la jefa del Servicio de Neonatología de este hospital, María Elena de León Ruiz Velazco, quien acotó que a partir del año 2000 esta estrategia opera en el hospital con excelentes resultados.
“A mayor prematurez, más tiempo en el hospital separado de mamá, invadido por equipos que le ayudan a respirar y a comer por vía intravenosa, nace el Programa de Atención Mamá Canguro como una necesidad de humanizar la atención al bebé”, detalló la especialista.
Se trata de un modelo de atención dirigido a bebés prematuros con peso menor a un kilo 800 gramos, que no presenten o hayan superado complicaciones de base y que se encuentren en el Servicio de Prematuros de este hospital cuyo médico haya aprobado su ingreso al programa, explicó.
Al respecto, la encargada del programa y especialista en enfermería, Blanca Patiño González, aseguró que Mamá Canguro es una estrategia que promueve el vínculo afectivo entre la madre y su bebé al estar durante cinco horas diarias de lunes a viernes en contacto piel a piel.
“Lo cual provee de calor al niño como si lo hiciera una incubadora y coadyuva en su pronta recuperación y ganancia de peso”, afirmó.
Resaltó que siempre que estuvieron en vientre de mama, escucharon latidos y la respiración de ella, cuando salen es algo diferente, es todo extraño, “con esta técnica al entrar al programa, el niño vuelve a escuchar otra vez los latidos de mamá, eso les ayuda a ellos, así mismo experimentan el calor de la madre”.
Dijo que la progenitora sólo requiere ingresar a la sala donde se realiza dicho programa con una bata y un top especial diseñado para mantener la posición del niño pecho a pecho y con la cabeza arriba, con ello se promueve el contacto piel a piel y la propia lactancia materna al procurar que el niño busque por sí sólo el seno materno.
Además de estar en contacto con su bebé, la madre podrá realizar actividades como la propia lactancia y la medición de la temperatura del niño a través del uso del termómetro, por lo que recibe instrucciones por parte del personal de enfermería.
Los requisitos para ingresar al programa, básicamente son que el menor tenga un peso mínimo de un kilo 250 gramos y que se encuentre en condiciones estables para que el médico apruebe su incorporación.
En cuanto a la mamá, únicamente se le pide que tenga la disposición de dedicar cinco horas diarias al programa y que utilice un top especial, se presente aseada, y lleve algunos artículos para el bebé como gorros y calcetas.
