MÉXICO, DF.- Perredistas y panistas importaron a México el conflicto venezolano entre chavistas y antichavistas. Por un lado, la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y Caribe del Senado -que encabeza la panista Mariana Gómez del Campo- recibió a los diputados venezolanos Miguel Ángel Rodríguez y Julio César Montoya, opositores a Nicolás Maduro, sucesor de Hugo Chávez.
Los venezolanos dijeron que en los últimos 14 años su país ha quedado devastado por el cierre de industrias, el desplome del sector petrolero y el aumento en la violencia que ha dejado 180 mil muertos.
En el otro frente, la senadora perredista, Dolores Padierna, convocó a una rueda de prensa para darle voz al parlamentario chavista Saúl Ortega, quien acusó a los legisladores cercanos al excandidato presidencial, Henrique Capriles, de injuriar al Gobierno de Maduro y de buscar generar violencia.
Además, el secretario general del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, recibió en la sede nacional del partido a Ortega y a Marelys Pérez, quienes acusaron a legisladores opositores a Maduro de emprender en México una campaña de desprestigio contra el Gobierno de Venezuela.