Un total de ocho toneladas de droga fueron incineradas en las instalaciones de la VII Zona Militar, ubicada en Nuevo León, en presencia del secretario General de Gobierno, Álvaro Ibarra Hinojosa, y del procurador del estado, Adrián de la Garza.
La droga fue incautada en diversas actividades conjuntas de los tres órdenes de gobierno, que dieron lugar a 230 averiguaciones previas por delitos contra la salud en distintas modalidades.
A detalle, se incineraron 7.9 toneladas de mariguana, tres y medio kilos de cocaína, cinco gramos de goma de opio, 14 gramos de metilfenidato, tres gramos de semillas de mariguana, 137 pastillas psicotrópicas y tres plantas de mariguana.
El acto fue atestiguado también por representantes de los tres niveles de gobierno y del Órgano Interno de Control de la Procuraduría General de la República para dar fe de la calidad y cantidad de narcóticos destruidos.