Muerte. Peritos indagan en el lugar del crimen.
Una de las hipótesis de la Fiscalía General de Justicia en la Zona Norte (FGJZN) sobre la masacre en Loma Blanca, donde murieron 10 personas y dos quedaron lesionadas, señala que los dos gatilleros se equivocaron de lugar.
Todo indica que probablemente la reunión del equipo de beisbol no era el punto que tenían que atacar, pues el supuesto blanco era presunto capo del Chapo Guzmán.
"Estamos indagando el entorno familiar y laboral de las víctimas y no hemos encontrado nada, ni nexos o conexiones directas con el crimen organizado, por lo que sostenemos la hipótesis de que los gatilleros eran inexpertos y se equivocaron del lugar", detalló personal de la FGJZN.
Los avances son lentos y se han cateado nueve casas. Se aseguraron dos vehículos con las señas particulares que los testigos proporcionaron a las autoridades; sin embargo, no hay nada concreto.
Con base en los datos proporcionados por los sobrevivientes, se harán dos retratos hablados que serán difundidos en los medios de comunicación para su identificación.
Dos de los sobrevivientes han solicitado ayuda psicológica de la Fiscalía; de hecho, en el funeral masivo había especialistas observando a los más afectados, quienes estarán en terapia por seis meses para que puedan superar el trauma.