Autoridades de Ciudad de México expresaron hoy su "indignación" por el asesinato de un joven de 15 años por resistirse al robo de un teléfono celular que se había comprado a plazos la semana pasada por su cumpleaños.
"Es un acto que realmente conmueve e indigna", dijo hoy a la emisora MVS Maricela Contreras, jefa de la delegación de Tlalpan, una de las 16 en que se subdivide administrativamente la capital mexicana, donde se registró el asesinato.
Miguel Ángel, un joven que había ahorrado semana a semana trabajando con un tío suyo en jardinería para comprarse el teléfono, perdió la vida ayer al recibir un navajazo en el tórax por negarse a entregar su tesoro.
Los hechos ocurrieron a las 6:30 hora local (11:30 GMT), mientras esperaba el paso de un autobús para ir a clase, y han causado gran conmoción en la capital.
El diario Reforma publica hoy en portada una foto del chico, a quien tras acuchillarle su asesino le arrebató el aparato y los zapatos deportivos que llevaba.
Miguel Ángel murió en plena calle, a cincuenta metros de su casa, y su familia recibió la noticia a través de una vendedora de jugos que vio lo ocurrido.
En la investigación que sigue la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) "aún no se tiene ningún avance", explicó a la emisora Contreras, quien consideró "verdaderamente lamentable" el suceso.
La delegación Tlalpan se encuentra al sur de la ciudad y, según Contreras, trabaja desde hace tiempo en medidas de autoprotección con los jóvenes como el finado, aunque sus efectos "son un poco tardados".