El Gobierno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aprobó el borrador de una enmienda para que cualquier acuerdo de paz con los palestinos que exija un canje territorial deba ser aprobado en referendo por toda la ciudadanía israelí.
"Cualquier acuerdo que se consiga en negociaciones, si es que eso ocurre, deberá ser llevado a referendo. Es importante que todo ciudadano y ciudadana voten este tipo de decisiones cruciales que definirán el futuro del Estado", dijo Netanyahu al presentar el proyecto.
El borrador del texto, que deberá recorrer aún un largo trecho en las instancias parlamentarias, coincide con el reinicio de los contactos directos con los palestinos, mañana para tratar de buscar una solución negociada al histórico conflicto de Oriente Medio.
El Gobierno israelí se reunió ayer, como todos los domingos, para aprobar también la liberación de 104 presos palestinos que cumplen condena en Israel por delitos de terrorismo cometidos antes del primer acuerdo de Oslo de 1993.
Se trata de una de las condiciones del presidente palestino, Mahmoud Abbas, para acudir a las negociaciones de Washington. Antes de esta votación, Netanyahu pidió a sus ministros que respaldasen su iniciativa de convocar un referendo sobre un eventual acuerdo de paz, que cuenta con el apoyo de los partidos nacionalistas porque, con ello, esperan bloquear la devolución de territorios a los palestinos.
En Israel nunca se ha celebrado un plebiscito, y para hacerlo será necesario enmendar la Ley Básica del Gobierno israelí.
