Marlines trabajan en Florida. (AP)
El pitcher Nathan Eovaldi estaba junto a su armario, enfrentando un grupo de cámaras de televisión y grabadoras, respondiendo a preguntas de rutina con pausas incómodas y respuestas breves que mostraban su juventud.
"Es el primer día", dijo finalmente con una sonrisa nerviosa. "No estaba listo para esto".
Cualquier atención que los Marlines de Miami reciban este año va a centrarse en jóvenes como Eovaldi, de 23 años. Eso estuvo claro ayer, cuando los lanzadores y catchers se entrenaron por primera vez en la pretemporada.
Sin Josh Johnson, Mark Buehrle, Aníbal Sanchez y Heath Bell -todos canjeados como parte de una purga salarial-, los Marlines van a reconstruir su cuerpo de lanzadores apoyándose en brazos jóvenes. Eovaldi y Jacob Turner, de 21 años, van a estar casis seguramente en la rotación, y Steve Cishek, con apenas tres años en la liga, va a ser el taponero.