Hay veces que uno piensa si los directivos del futbol mexicano son o nomás se hacen, porque les meten cada gol que los hace parecer novatos y que deben ser el hazmerreír en otras latitudes de este sufrido planeta.
El caso más actual es el de Dorlan Pabón, futbolista colombiano a quien el Monterrey compró hará cosa de un año. Como la cuota de extranjeros de los Rayados estaba completa, lo prestó al Betis de Sevilla, donde jugó la temporada pasada para integrarse a la plantilla norteña en este Apertura 2013. Pues sucede que al Valencia se le antojaron los servicios del morenazo y ¡púmbale!, le cayeron con la cantidad estipulada por los regios en la cláusula de rescisión, obviamente con el consentimiento del jugador y voló la paloma. En la fecha 6 de nuestra liga, se les va un refuerzo que además, estaba funcionando muy bien.
Aquí lo primero que salta es la necedad de los federativos para continuar con esa farsa llamada "draft", donde se supone se hacen las transacciones en el futbol nacional y poner una fecha de cierre de registros. Si el sueño de todo futbolista, azteca, centro o sudamericano es jugar en Europa, pues me suena lógico que en un mundo globalizado se empate la última fecha para contratar jugadores con la del Viejo Continente y asunto arreglado. Lo que se hace en México sólo abona para coyotes y promotores deshonestos, pegados a dirigentes incapaces o de dudosa moral.
También el caso Pabón es la eterna disyuntiva entre lo legal y lo ético. El cuadro naranjero está en su derecho de brillar el billete y quedarse con el jugador. Eso es legal. Lo que no tiene madre es lo que hizo Dorlan al burlarse de la institución que le dio cobijo, amparo y un contratote. Ahí queda para ver si aprenden.
Otro caso es el de Marco Fabián. El chavo se "voló" con los elogios recibidos en los Juegos Olímpicos hace un año y aseguró que estaba arreglado en Europa. El dueño de Chivas dijo que no salía bajo ningún concepto y el jugador se emberrinchó, al grado que desde entonces su rendimiento ha sido paupérrimo. Ahora en la fecha 6, con todas las broncas que tiene el Rebaño, lo sueltan para que emigre. Ora sí que ya no entendí.
El tercer caso es el de Teófilo Gutiérrez y Cruz Azul. Al alto mando celeste se le advirtió que era un pájaro de cuenta, indisciplinado y conflictivo pero ahí fueron de cola pronta por él. El nene se quiere ir a River Plate aduciendo que es un honor jugar con los "gallinas". Nomás que a River de "millonarios" sólo les queda el mote y no han mandado la lana para hacerse de los servicios de esa "joyita". Es la fecha 6 y la Máquina se queda sin un extranjero y no ha llenado el cupo.
Por eso les digo que los agentes de estos jugadores y sus dirigentes deben de estar, en plena fecha 6, doblados de la risa.
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