LA COLUMNA DEL PERRO

DOG HOUSE

Parece que fue ayer, pero fue hace más de diez años, que el gran amigo Rogelio Cuéllar, nos invitó a muchos veterinarios del País a una Convención en Las Vegas… Nos pusimos de acuerdo para irnos por carretera al aeropuerto de El Paso, Tex., mis amigos y también colegas Ricardo Carmona, Cruz González, Ramiro Ramos y un servidor. Por tal razón tuvimos mucho tiempo para convivir y para platicar de todo y de todos.

Especialmente recuerdo las pláticas con Ramiro, a quien conocía desde que éramos niños, ya que vivíamos por el mismo rumbo, él por la Escobedo y yo por la Javier Mina, a dos cuadras de la Colón al poniente, vecino también del colega Jorge González… Ramiro, me reiteró durante ese viaje en las largas pláticas que sostuvimos, que a pesar de saber de mí, desde hacía muchos años, no me conocía, pues yo, me dijo Ramiro, pensaba que eras de otra forma… No sé cómo te imaginabas que yo era, pero recuerda que nunca se debe de juzgar a un libro sólo por la portada.

Platicamos también de nuestras familias y coincidimos en que eran lo más importante para nosotros, que eran el motor principal de nuestras vidas y lo que nos hacía levantar a diario para trabajar con gusto para ellas.

Ramiro en aquel viaje, también me comentó, que aunque sentía muy fuerte la vocación de Médico Veterinario y aspiraba siempre a dar lo mejor de sí mismo para lograr ser muy bueno en nuestro oficio, con aquella mancuerna del también amigo y colega Javier Armando Villarreal… Y es así como yo lo prefiero recordar, pues fueron sus mejores momentos, creo yo… No creas Miguel a veces he pensado en cambiar de giro me decía Ramiro, es decir cambiar el bisturí por la sotana. Para quienes lo conocimos, sabemos que fue una persona íntegra, por lo tanto también creo que en el recuento de sus acciones, en su paso por esta vida, su saldo haya sido favorable y esté muy seguramente junto al Creador.

Ahora que ya te fuiste amigo Ramiro, y al venir a despedirte y ver pasar junto a mí a tu amorosa esposa con tu hijo, cargando la urna con tus restos, no pude evitar el cuadrarme delante de esta escena, y aunque los ojos se me llenaron de lágrimas, mi corazón se llenó de alegría al saber que ya estás descansando en otra dimensión.

La casualidad quiso, que de niños fuéramos vecinos… La vocación quiso que fuéramos colegas… La empatía que sentíamos quiso que fuéramos amigos… Y si Dios quiere y tú me echas la mano al hablarle de mí, muy seguramente volvamos a ser del mismo barrio allá donde tú estás en la otra vida, cuando a mí me llegue la hora.

1. Mopi (izquierda) hembra, esterilizada lista para encontrar hogar.

2. Pancho (derecho) macho, esterilizado en busca de un hogar.

Anímate no lo pienses más, adopta un amigo leal e incondicional sin costo alguno, sólo envíanos un correo a: miguel_daviladavila@hotmail.com, o comunícate al 871-1201787, en horario de oficina. El correo y teléfono anterior es para personas interesadas en adoptar una mascota.

Esteriliza a tu mascota, no olvides llevar al día el esquema de vacunación de tu mascota. Identifícala con una placa que contenga información básica en caso de extravío, no permitas que se convierta en una estadística más de muerte en la calle. Si por alguna razón tienes una mascota no deseada no la abandones en la calle, no la condenes a muerte si ésta no logra encontrar un lugar seguro donde no la agredan, donde pueda protegerse del clima, y donde pueda encontrar agua y alimento. Demos el ejemplo a nuestros hijos, tomemos decisiones responsables.