La ciencia no sólo nos proporciona conocimiento sobre la realidad: también puede servirnos como guía para valorar los principios morales de nuestras sociedades. (ARCHIVO)
La ciencia no sólo nos proporciona conocimiento sobre la realidad: también puede servirnos como guía para valorar los principios morales de nuestras sociedades.
Tal es el planteamiento central del nuevo libro La curva moral de la ciencia que ahora escribe el psicólogo y escéptico estadunidense Michael Shermer, colaborador de la revista Scientific American y presidente de la Sociedad Escéptica, que agrupa a 55 mil miembros.
"La ciencia no sólo nos muestra cómo son las cosas, sino cómo deberían ser. Esto incluye también a la moral", expresó Shermer durante su participación en el festival La ciudad de las ideas, que se realizó en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
El también fundador de la revista Skeptic adelantó algunas de las ideas que contendrá su nuevo libro, subtitulado Cómo la ciencia ha modificado la curva de la moral universal hacia la verdad, la justicia, la libertad y la prosperidad. Recordó que la moral no es absoluta, sino que adquiere diversos matices según el contexto cultural donde se genera.
El pensador, uno de los 70 conferencistas que expusieron sus "ideas peligrosas" en el auditorio del complejo cultural de la BUAP, mostró una serie de cuadros estadísticos donde se aprecian gráficamente conceptos como las diferencias temporales en la conquista del voto femenino, que en EU se dio en 1920, mientras en México se otorgó hasta 1948).
Otras de sus gráficas mostraron las diferencias físicas y culturales entre las poblaciones de Corea del Norte y del Sur (en el segundo país la gente tiene en promedio mayor educación y estatura) así como el claro vínculo en países occidentales como EU entre democracia y libertad y prosperidad.
El escritor científico, quien ha hurgado en las bases de nuestras creencias en hechos sobrenaturales, planteó que la respuesta sobre qué hace una conducta correcta o equivocada primero se trató de responder apelando a la divinidad.
Sin embargo, añadió, ahora la ciencia nos ofrece una nueva perspectiva para valorar temas espinosos como el aborto, los derechos de personas homosexuales o la mutilación de genitales en las mujeres: "la moral tiene que ir más allá para incluir a todos los seres sintientes".
Durante el segundo día de actividades del festival La Ciudad de las Ideas, que concluyó este sábado 9 de noviembre, también participaron Roz Chast, cartonista de la revista New Yorker; el psicólogo Robert Provine, estudioso de la risa; el consultor Apollo Robbins y el artista del yo-yo, Yo-yo black.
