Tradición. Desde hace más de 56 años locatarios del Mercado Alianza peregrinan con sus familias para agradecer a la Guadalupana.
Con devoción recorren a paso lento calles del Centro rumbo a la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe entonando los ya tradicionales cantos. Los propietarios de decenas de locales del Mercado Alianza y sus familias, dan gracias por los favores recibidos.
Desde hace más de 56 años, se celebra la tradicional peregrinación del Mercado Alianza que culmina con los 19 días de recorridos hacia el santuario de la Virgen de Guadalupe. Este año, además de dar gracias, piden el aumento de ventas.
"La petición en general es que mejoren las ventas, que la gente nos vuelva a agarrar esa confianza que nos tenía antes, la prensa nos ponchó nuestros negocios, cosas que no sucedían aquí nos las achacaron y la gente dejó de venir", dijo Luis Armando Solís, integrante del Comité de Festejos de la Virgen de Guadalupe del Mercado Alianza.
Dice que en los últimos años, los hechos violentos al poniente de la Ciudad que se registraron cercanos al Mercado, la sociedad los relacionaba con el lugar y las ventas se vinieron abajo hasta en un 60 por ciento.
"Normalmente los hechos violentos eran en los alrededores, El Cerro de la Cruz, la Privada 5 de Mayo, entre otros sitios y decían que en el Mercado Alianza, entonces a raíz de eso bajaron mucho las ventas".
Aunque en este año ha habido una mejoría, los locatarios todavía no pueden recuperar su clientela de siempre, pues, además de la inseguridad este hecho obedece también al encarecimiento de los precios.
"Los productos han subido mucho, a veces se siente uno triste de dar caro, pero no podemos bajarlos más".
Aun y con la carencia de recursos, el Mercado Alianza ofrece una gran fiesta el día 11 de diciembre, fecha en la que peregrinan. Esto se logra, gracias a la colaboración de los clientes, quienes apoyan con las limosnas que son depositadas en una pequeña caja colocada a un costado del altar de la Virgen de Guadalupe.
La festividad inicia por la mañana, con el ofrecimiento de un desayuno a los danzantes que los acompañan en el recorrido.
A las 2 de la tarde comienza la repartición de la tradicional reliquia que este año requirió de 200 kilos de carne, 40 cajas de sopas y 19 kilos de arroz.
Y es que es tradición que, además de los locatarios y sus familias, habitantes de las colonias: Cerro de la Cruz, Miguel Hidalgo, la Constancia, Polvorera, San Joaquín, Primero de Mayo, Caleras Solares, Durangueña, entre otras, se unan, tanto a la festividad como a la peregrinación.
"La reliquia es para todos, aquí no decimos que no, todas las colonias estamos agradecidas con la Virgen de Guadalupe", dice.
Comenta que ante la multitudinaria respuesta, la organización comienza después del 28 de octubre y que el costo puede ir desde los 18 hasta los 22 mil pesos, que se ejercen en el pago a la danza, la reliquia y arreglos o remodelaciones al altar, pero que todo se hace con devoción, tanto de los locatarios como de las personas que cooperan con sus donativos o su trabajo, pues dicen, "aunque a veces nos vaya un poco mal, las bendiciones que recibimos de la Virgen siempre son más y eso lo agradecemos".