Después de ir ganando en el primer tiempo, la afición comenzó a realizar la popular 'ola' durante varios minutos. (Enrique Terrazas)
Sin pisar el acelerador a fondo el Santos Laguna dio cuenta anoche del Dynamo de Houston por 3-0 en un partido de entresemana que fue una auténtica fiesta, que gozaron los aficionados laguneros de principio a fin, pues su equipo calificó a la semifinal de la Concacaf por segundo año consecutivo.
En un horario poco usual se celebró el partido de vuelta de Cuartos de Final de la Concacaf entre Santos Laguna y Dynamo de Houston, sin embargo, el Estadio Corona registró un lleno completo, ya que el boletaje se agotó.
Las porras de los Guerreros estuvieron presentes en el partido. La Tribu desde antes de las cuatro de la tarde se reunió en su lugar de costumbre en el Bosque Venustiano Carranza, al mando de Magda Tovar y su esposo Ariel, para trasladarse de manera puntual al Territorio Santos Modelo y apoyar de manera incondicional a sus Guerreros.
En el partido de ayer estaba en juego el pase a la semifinal. El equipo Seattle Sounders, que el martes por la noche había eliminado a los Tigres al vencerlos por tres goles a uno estaba en espera del vencedor del duelo entre laguneros y texanos.
Consciente de la importancia del partido, el técnico Pedro Caixinha mandó a la cancha a su cuadro titular, en el que reapareció el lagunero Rafael Figueroa en la defensa central.
El Dynamo de Houston saltó a la cancha con un uniforme anaranjado, parecido al de Jaguares de Chiapas, mientras que Santos Laguna utilizó su tradicional uniforme con rayas horizontales verdes y blancas.
Las emociones se vivieron desde el inicio del partido y las porras a favor de Santos Laguna empezaron a escucharse en las tribunas, pero un remate de cabeza de Bobby Boswell al minuto seis enfrió los ánimos, afortunadamente no fue de consecuencias.
No habían pasado cinco minutos de la primera anotación de los Guerreros cuando cayó la segunda. Hérculez Gómez aprovechó un error de la defensa visitante y anotó el dos a cero. El norteamericano de ascendencia mexicana corrió a la tribuna para festejar su gol entre los aficionados.
La primera mitad terminó dos goles a cero a favor de Santos Laguna, en el global 2-1 y el panorama del partido tomaba un tono verdiblanco. Oribe Peralta ya no salió para la segunda parte por lesión en rodilla derecha.
Los tambores y trompetas de la Tribu no dejaron de tocar durante el encuentro, animando a los Guerreros a que fueran al ataque para que ampliarán el marcador y amarrarán la calificación a la semifinal.
Los cánticos y porras resurgieron en las tribunas. El pase a la semifinal estaba cerca, ganaba Santos Laguna por tres a cero y en el global 3-1.
Entre aplausos y porras fueron despedidos los jugadores de Santos Laguna. La afición estaba contenta, pues los Guerreros estaban en la semifinal de la Concacaf por segundo año consecutivo.