Cuando una cosa no sale bien, pero estuvo casi a punto de lograrse se dice que “Por un pelito se lograba”. El delantero tiró a gol y la pelota pasó rozando el poste, pero no entró en la portería, entonces por un pelito y se anotaba el gol del triunfo.
Es difícil montar a caballo, por lo menos yo nunca pude hacerlo, pero hay algunos rancheros que no sólo lo montan, sino que además lo montan sin silla, entonces se dicen que montan a pelo, no porque monten literalmente a un pelo, sino porque ponen las asentaderas en el pelo del equino, sin que haya habido silla de por medio.
Ahora recuerdo esa tan frecuente pregunta de que si un pelo y un cabello son lo mismo, y mi respuesta es que el cabello es siempre pelo, pero el pelo no siempre es cabello. ¿Por qué?, pues porque el cabello es el pelo que nace en la cabeza. El pelo nace en la cabeza y en cualquier otra parte del cuerpo.
Hay también otro tipo de pelo que es el vello y que no siempre es muy bello, al contrario, una mujer con mucho vello puede ser que se vea bastante fea, aunque nunca falta un roto para un descosido, porque hay tipos que tal vez estén un poco enfermos de la azotea, porque les encantan las mujeres peludas, así que las prefieren con el pelo de las axilas, con las piernas como de chango peludo y con mucho filamento piloso en otras partes del cuerpo.
Si alguien le pregunta ¿cuántos pelos tiene un gato? usted diga cualquier número grande y dígale al preguntón que si no lo cree que agarre a un minino y se ponga a contarlos. Poco a poco van desapareciendo las peluquerías que en un tiempo eran reducto en el que se refugiaban los hombres que se iban a “hacer el pelo” o a “cortarse el pelo”, pero también a oír la plática sabrosa del peluquero que sabía todo de todos los temas y si hablaba muy atrevidamente es que no “tengo pelos en la lengua” y si se peleaba con alguien se decía que “se agarraron de los pelos”. Ahora lo que eran peluquerías se llaman estéticas y el dueño generalmente es un tipo gay y en ellos –en los locales, no en los tipos gay- se atiende por igual a un señor muy serio que va que hacerse el casquete corto como a una señora algo ridícula que va a la que le corten el cabello y a que le pongan unos rayos para que se vea esplendorosa, aunque la verdad es que lo gordo nadie se lo quita.
Un buen pintor usa en sus trabajos pinceles de pelo de camello que están hechos como las cuerdas de violín de tripa de gato, porque ni los pinceles son de camello ni las tripas son de gato, pero así se les ha dicho siempre y creo que así se les va a seguir diciendo.
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PREGUNTA DEL PÚBLICO:
Miguel de la Torre: ¿Cuál es la diferencia entre una chaqueta y una chamarra?
RESPUESTA:
Depende. En México usamos ambos vocablos como sinónimos. En otros países la chaqueta es lo que nosotros llamamos el saco como el saco del traje, aunque en algunas otras partes un saco es un costal.
Me retiro con esta frase: El hombre es un dios cuando sueña y un mendigo cuando reflexiona ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.