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Las Palabras Tienen la Palabra

El que se mueve no sale

Juan Recaredo

Mover es dejar un lugar y pasar a ocupar otro, pero mover es también agitarse. Yo me muevo cuando me traslado de la sala a la recámara, pero si entonces me pongo a bailar un mambo entonces puedo decir que me puse a mover el bote, porque bote es uno de los muchos sinónimos que tiene la palabra trasero.

Ciertos argumentos son tan absurdos que cuando me los exponen me mueven a risa. A mi Tía Sinalefa le decían “la líder” porque cuando caminaba “movía las masas” aunque en realidad se referían a las masas de carne que se acumulaban en su redondo y voluminoso trasero. Fíjese, apenas llevo dos párrafos de mi comentario y ya hice dos alusiones al nalgatorio al que mejor llamaré las asentaderas para que no se oiga tan brusco.

Hablando de líderes podemos citar al movimiento obrero y el tema también nos hace recordar a Don Fidel Velázquez, líder casi eterno de la CTM –Confederación de Trabajadores Mexicanos- que decía que el que se mueve no sale en la foto, una forma metafórica de decir que para alcanzar un buen puesto en política, había que esperar el momento oportuno y no querer sobresalir antes de tiempo.

Si me van a tomar una foto y en el momento de mover el disparador me muevo, entonces la foto saldrá movida, es decir, borrosa, pero una movida puede ser una acción ilegal clandestina o puede ser también una amante oculta y el que tiene una movida de éstas andará como si caminara en arenas movedizas porque si lo descubre la esposa, puede hundirlo muy feamente.

Una movida es también un lance en el ajedrez y hay que recordar siempre que la fe mueve montañas y que a Galileo Galilei le costó la vida afirmar tercamente que la Tierra “…y sin embargo se mueve”.

Hay muchas cosas móviles como el teléfono celular que en algunas partes lo llaman así, teléfono móvil. Está también el automóvil, el Papamóvil y el móvil del crimen que fue el que “movió” al asesino para “darle chicharrón” a su víctima.

La palabra mueble se refiere a algo que puede moverse con cierta facilidad. Curiosamente por lo general los muebles de una casa -el comedor, la sala o la recámara - están fijos, pero en algunas partes, en el noreste de México, por ejemplo,- se le llama mueble al vehículo, lo cual me parece muy correcto porque un auto es mucho más movible por ejemplo que un sofá o una cama.

Y termino con la primera parte de un soneto muy religioso y muy conocido, pero que no se sabe con seguridad quién lo escribió: “No me mueve, mi Dios para quererte el cielo que me tienes prometido, ni me mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte…”

Escríbale a Don Juan Recaredo: La dirección de su correo electrónico es donjuanrecaredo@gmail.com

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PREGUNTA DEL PÚBLICO:

Tomás Escudero: Dicen que las palabras tuiter y tuitear ya están en el Diccionario de las Real Academia Española. ¿Es cierto?

RESPUESTA:

No sé si esas palabras estén ya incorporadas a nuestro idioma.. Yo las busco en el Diccionario “en línea” y me dice que esas palabras no existen.

Me retiro con una frase de José Ortega y Gasset: No sabemos lo que nos pasa y eso es precisamente lo que nos pasa: Nadie debe obtener beneficio de la ignorancia de otra persona. ¡Fíjese! ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.

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