Pedro Infante y Jorge Negrete eran dos charros del cine mexicano y a pesar de ser charros cantantes los dos, sus personalidades eran muy diferentes y parece que en la vida real no se soportaban. Sin embargo el dinero todo lo puede y un día se pudo reunir a los dos en una película a la que se tituló “Dos Tipos de Cuidado”.
¿Y por qué tipos? Vamos por partes ¿Qué es un tipo? Pues un tipo puede ser muchas cosas. Un tipo puede ser un individuo, un sujeto cualquiera, alguien que pasa por la calle y del cual no sabemos ni su nombre. “Ese tipo tiene cara de malo” y ya.
Pero un tipo también puede ser un ejemplar, el prototipo que es el modelo de una virtud o cualidad o un estereotipo que según el diccionario es “una imagen aceptada comúnmente por un grupo o sociedad con carácter inmutable”.
Para no meternos a descifrar esa definición, citemos otros tipos de tipos. Un tipo puede ser también una pieza de imprenta, o simplemente una letra realzada en metal que sirve para imprimir generalmente en papel. Una familia de tipos o todo el conjunto de ellos constituye una tipografía, es decir de tipos o letras con rasgos similares que se utilizan para formar palabras y luego imprimirlas.
Con frecuencia usamos la palabra tipo como sinónimo de persona. Así decimos por ejemplo “Andrés es un buen tipo” o “Manuel es un tipazo” refiriéndonos a ellos como personas de cierta calidad. En otro caso diríamos que “Jesús tiene tipo de arquitecto” o sea que aunque el tal Chuy no tiene la profesión, sus maneras corresponden a la idea que tenemos de un arquitecto, de sus maneras o de su comportamiento.
Al escribir el párrafo anterior me acordé de la palabra arquetipo que por cierto no tiene nada que ver con la arquitectura. En psicología un arquetipo es la representación que se considera modelo de cualquier manifestación de la realidad. “Juan es el arquetipo del político corrupto”, por ejemplo.
La palabra tipo se utiliza también para calificar la figura o talle de una persona. Por eso cuando decimos que “Fulano tiene buen tipo” estamos queriendo decir que tiene buena figura, que se ve bien.
Si a una muchacha le presentan a un hombre con la idea de que le guste y lo haga su novio, ella puede ser que se niegue diciendo “Es un chico simpático pero lo siento, no es mi tipo” o sea que no le gusta como para enredarse con él en una relación de noviazgo.
Seguramente habrá otros tipos de tipos que podríamos citar aquí pero yo termino con el tipo de cambio que es el valor equivalente de monedas de diferentes países.
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PREGUNTA DEL PÚBLICO:
Melissa Villalobos. Si digo rompido o roto ¿está bien?
RESPUESTA:
No. Rompido se usaba en el español antiguo pero actualmente se considera incorrecto. Lo correcto es roto.
Me retiro con esta frase: En política el vencedor es el que tiene siempre la razón. ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.