Lohan decidió llevar muchos looks.
"Antes muerta que sencilla", dice la canción que Lindsay Lohan aplica hoy que ingresa a un centro de rehabilitación para cumplir con 90 días de tratamiento que le impuso un juez por haber incumplido su libertad condicional y mentirle a la policía. Para su estancia de tres meses en el lugar, la actriz preparó 270 atuendos, algunos de los cuales mostró en la foto de posteó en Instagram. "90 days and 270 looks", escribió la socialité. Lo que al parecer no le habían explicado es que en el centro Seafield, de Nueva York, donde se rehabilitará, sólo puede entrar con siete cambios de ropa, uno para cada día de la semana. Otro ajuste que tendrá que hacer Lohan en su ingreso, de acuerdo al sitio TMZ, es dejar fuera el cigarro, pues aunque solicitó a su abogado que pidiera autorización para fumar, el lugar no hace excepciones.