El Centro Multidisciplinario de Innovación Tecnológica (CMIT) cuestionó el Programa Vivienda Digna que opera la Sedatu, pues “podría generar “guetos” agrarios”, si no considera la cultura, tradiciones y valores de campesinos e indígenas, así como su entorno.
Por ello, el titular del CMIT, Carlos Sandoval, pidió al titular de la Sedatu, Carlos Ramírez Marín, crear un Consejo Nacional para la Vivienda en el Medio Rural que incluya a representantes indígenas y campesinos de núcleos agrarios para evitar que el Estado siga creando vivienda por decreto.
Indicó que se debe impulsar la formación de Sociedades Inmobiliarias Ejidales para que a través de éstas el Estado sea capaz de garantizar vivienda digna, y evitar las grandes empresas que lucran con la tierra de carácter social o ejidal.
El consejo se podría conformar con mesas de trabajo para que haya inclusión y no solo un programa de vivienda sexenal con muchos recursos sin antes hacer un plan piloto para definir lugares a monitorear y así comprobar que se otorgó una verdadera vivienda digna.
Sandoval Miranda detalló que para su funcionamiento, se “pueden utilizar algunas figuras ya existentes como la Procuraduría Agraria, instancia que favorece este tipo de participación de los grupos agrarios a través de asambleas y que bien podrían enfocarse al tema de la vivienda”.
Refirió que en México nueve millones de hogares están en rezago habitacional ampliado, lo que implica vivir hacinados o en viviendas construidas con materiales de baja calidad y duración, por lo que, dijo, urge evitar que los núcleos agrarios se conviertan en “ciudades dormitorio” o en “guetos”.
Ejemplificó que en la región Tarahumara están acostumbrados a vivir en grandes espacios mientras que en la zona Mazahua los terrenos son más pequeños por el crecimiento urbano, por lo que “es absurdo tener una vivienda rural estándar”.
Además, a 21 años de la reforma al Artículo 27 Constitucional, “no se detonó la figura de las inmobiliarias ejidales”, pues de 1992 a la fecha se han constituido más de 30, y quienes si operan son “despachos de consultores leoninos” que pagan “menos del 50 por ciento del precio de mercado”.
Destacó la importancia de las inmobiliarias ejidales, pues “existen 30 mil los núcleos agrarios, de donde se genera el 60 por ciento del área de crecimiento urbano en México, lo que involucra a casi 800 núcleos agrarios, por lo que debe haber al menos 800 inmobiliarias ejidales”.
