Llegan en medio del caos

Oribe Peralta es un hombre de pocas palabras, parco, seco y al que no le agradan las bromas.

El "Hermoso" fue el hombre más asediado en la llegada del Tricolor a México y aunque decenas de fanáticos lo rodeaban para felicitarlo y pedirle fotos y autógrafos, dijo que no se siente el héroe de esta misión llamada repechaje mundialista.

"Si metía goles era por mis compañeros, yo no juego tenis, este es un deporte de conjunto, el mérito es de todos. Estoy cumpliendo mis objetivos. Mi accionar es gracias a mis compañeros, algunos goles nada más los tuve que empujar", explicó.

Y aunque el atacante ha querido mantener un bajo perfil, lo cierto es que de los últimos 17 goles del Tricolor, 10 han sido de él.

"Es una alegría muy grande. El que te reconozcan tu esfuerzo es algo muy bonito. Estoy muy contento por haber conseguido el boleto al Mundial. Fuimos a hacer lo que teníamos que hacer a pesar de que se sufrió, al final salieron bien las cosas", añadió.

Oribe trató de zafarse de la lluvia de preguntas, caminaba y se abría paso entre la muchedumbre, ya le urgía estar lejos del barullo, llegar cuanto antes a descansar al Centro de Alto Rendimiento donde se encuentra concentrado su club, el Santos, en espera de su partido de cuartos de final frente al Querétaro, el próximo domingo.

Incluso el "Cepillo" Peralta tampoco le tomó importancia a la idea de salir del futbol mexicano.

"No sé nada, yo lo único que sé es que estoy contento en Santos y así quiero seguir", apuntó.

LLEGAN EN MEDIO DEL CAOS

Empujones, gritos, risas... ¡El caos! Intempestivamente, una multitud se congrega en la Terminal 2 del aeropuerto capitalino en espera de los integrantes de la Selección Mexicana de Futbol, que pasaron de repudiados "ratones verdes" a elogiados héroes. No hay memoria. Las críticas desaparecen. Hoy todos quieren presumir la playera.

Lo intentan muchos, que con la prenda del Tri se aferran a cazar autógrafos; lo ensaya un par de hermanos, identificados con corbatas tricolores; lo hacen incluso los orgullosos fans azulcremas, quienes impregnan de amarillo el lugar.

Les recomiendan no jugar

El problema no fue llegar a Nueva Zelanda, el problema fue el regreso.

Y es que los seleccionados mexicanos que disputarán la Liguilla del Apertura 2013 este fin de semana pueden resentir el largo viaje a tierras de Oceanía.

América puede verse más afectado, pues 10 jugadores fueron la base del equipo mexicano; después de ellos está el León, que tuvo tres llamados.

"Para la ida se tuvo una semana para adaptarse, el organismo se aclimata en ese tiempo, pero aquí, de regreso, claro que te pesará el horario", reveló Mario Mercader, especialista en medicina del deporte.

Los jugadores "tendrán algún tipo de conflicto. Jugaron el martes por la noche, y regresaron el jueves, ese es el problema, unos sólo tendrán el viernes, porque juegan el sábado, es muy poco tiempo para recuperarse", agregó.

En opinión de María Cristina Rodríguez Gutiérrez, directora de Medicina del Deporte en la UNAM, lo mejor sería que los seleccionados no tuvieran actividad por ahora. "Necesitan descansar por el estrés, el clima, etcétera. Lo mejor sería que descansaran, porque la velocidad de reacción no va a ser la misma, porque estás cansado y no estás en condiciones normales".

La salud de los seleccionados no se afectaría.

"No es un problema de vida o muerte, pero sin duda afecta a tu desempeño físico, habría que ver qué tan importante es el jugador como para hacerlo participar".

Toluca ya anunció que Antonio Naelson "Sinha" no participará, los otros equipos como América, León, Morelia y Cruz Azul, no han mencionado nada al respecto.