Las fuertes lluvias y vientos que azotaron el viernes por más de 10 horas a la región central de Honduras dejaron un saldo de dos personas desaparecidas y otras 500 afectadas y numerosos árboles y muros derrumbados, según las autoridades.
"Nos solidarizamos con los afectados por la fuerte lluvia. He dado instrucciones para que ningún afectado se quede sin apoyo", dijo el presidente Porfirio Lobo a periodistas.
Informó haber ordenado a los bomberos, militares y policías "adoptar acciones inmediatas a fin de respaldar a nuestros compatriotas afectados".
Reportes preliminares de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) indicaron que el mal tiempo causó destrozos y daños materiales en las provincias de Francisco Morazán, Comayagua y La Paz.
"Hay dos personas desaparecidas, numerosos postes del alumbrado público, árboles y rótulos comerciales derribados por doquier", afirmó Lisandro Rosales, jefe de la Copeco.
Más de 150 sectores poblaciones de Tegucigalpa y sus alrededores quedaron sin electricidad por más de 12 horas.
Rosales dijo que 45 viviendas están inundadas, tres destruidas y 25 personas permanecen en albergues municipales de la capital, donde al menos 29 barrios pobres se inundaron.
Las lluvias, causadas por un fenómeno atmosférico en el Caribe, continuarán en casi todo el territorio nacional, aunque con menor intensidad, según el Servicio Meteorológico Nacional.