La amibiasis es considerada como un importante problema de salud pública y puede complicarse en lo que se conoce como cuadros disentéricos amibianos, caracterizados por diarreas abundantes que, de no atenderse, pueden llevar al paciente a la deshidratación y hasta la muerte. INGIMAGE
La amibiasis es la más común de las parasitosis, siendo los menores de 10 años los más propensos a desarrollarla, informó el coordinador de Vigilancia Epidemiológica en el IMSS Jalisco, Guadalupe Castañeda López.
El especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en epidemiología precisó que más que los estudios de laboratorio, son los datos clínicos los que orientan al médico para llegar al diagnóstico de amibiasis.
Añadió que es el más característico la presencia de sangre y moco en las evacuaciones, aunque también el exceso de gases y episodios agudos de diarrea y estreñimiento, suelen estar presentes en este tipo de casos.
Detalló que la amibiasis es considerada como un importante problema de salud pública y puede complicarse en lo que se conoce como cuadros disentéricos amibianos, caracterizados por diarreas abundantes que, de no atenderse, pueden llevar al paciente a la deshidratación y hasta la muerte.
“Si bien es durante la infancia y muy marcadamente a los cinco años de edad cuando la amibiasis se desarrolla más frecuentemente, ésta aparece también en adultos jóvenes aunque con manifestaciones menos severas que en los infantes”, destacó.
Refirió que el adulto llega a habituarse al problema y, a menos que aparezca sangrado en las heces, es que acude al médico.
En cuanto al tratamiento, dijo que éste es a base de metronidazol el cual se administra durante 10 días tanto al paciente como al resto de los miembros de la familia y el apego al mismo es fundamental para que se obtengan buenos resultados.
Por otro lado, destacó la importancia de una adecuada higiene tanto de manos como de los alimentos para evitar en lo posible el desarrollo de este padecimiento y otro tipo de enfermedades gastrointestinales.
Lo básico, indicó, es lavarse las manos con agua y jabón antes y después de ir al baño, así como previo al consumo de alimentos.
Agregó que en lo que respecta a la desinfección de frutas y verduras, aunque el uso de gotas es recomendable, es muy efectivo también el lavado de dichos alimentos bajo el chorro del agua.
Insistió en que “si la gente no modifica sus hábitos de limpieza de manos y de alimentos éste y otros problemas de parásitos intestinales, se seguirán presentando”.
Refirió que el metronidazol es el tratamiento de elección para la amibiasis y existen otras parasitosis en las que también funciona, como es el caso de las giardiasis, por lo que tiene que ser el médico quien lo prescriba y determine, en función del parásito de que se trate, la duración del tratamiento.