Benedicto XVI. (Archivo)
El Papa Benedicto XVI aseguró hoy a los enfermos que no son inútiles ni deben sentirse abandonados y los instó a no huir de su condición porque “lo que cura al hombre no es esquivar el sufrimiento”.
Esto en un mensaje con motivo de la próxima Jornada Mundial del Enfermo, que se celebrará el próximo 11 de febrero de 2013 en la ciudad alemana de Altotting, bajo el lema “Anda y haz tú lo mismo”, inspirado en un pasaje bíblico.
El pontífice, de 85 años, quien padece una artrosis en su pierna derecha que le provoca dolor al desplazarse en largos trayectos a pie y le ha obligado a utilizar un bastón, se dijo “especialmente cercano” a todos aquellos que pasan un difícil momento de prueba a causa de la enfermedad y el sufrimiento.
Retomó la parábola del “buen samaritano”, quien –según el relato de Jesús- acudió y curó a un judío que había sido asaltado con violencia, y aseguró que todos los fieles católicos deberían seguir su ejemplo.
Insistió que todo cristiano está llamado a tener una atención prioritaria con los necesitados, de manera concreta hacia quien está herido en el cuerpo y el espíritu, hacia quien pide ayuda, aunque sea un desconocido y no tenga recursos.
“Esto no solo vale para los agentes pastorales y sanitarios, sino para todos, también para el mismo enfermo, que puede vivir su propia condición en una perspectiva de fe”, indicó.
“Lo que cura al hombre no es esquivar el sufrimiento y huir ante el dolor, sino la capacidad de aceptar la tribulación, madurar en ella y encontrar en ella un sentido mediante la unión con Cristo, que ha sufrido con amor infinito”, agregó.