Competencia. Android de Google, iOS de Apple, BlackBerry de RIM, Windows Phone de Microsoft y Symbian de Nokia son algunos de los sistemas operativos más populares del mundo.
Android de Google, iOS de Apple, BlackBerry de RIM, Windows Phone de Microsoft y Symbian de Nokia son algunos de los sistemas operativos más populares del mundo.
Fueron creados por las diferentes empresas tecnológicas para respaldar las funciones propias de teléfonos inteligentes y tabletas.
En general, un sistema operativo para móviles puede definirse como aquel programa o software diseñado para hacer que un equipo portátil trabaje. Por ejemplo, es el responsable de que puedas utilizar aplicaciones (apps) o de que aparezca un teclado virtual (creado mediante software) cada vez que quieres hacer una búsqueda en tu iPhone.
En esencia, éstos son similares a los programas responsables de que tu PC o Mac opere correctamente; sin embargo, tienen la particularidad de que, desde su concepción, se buscó hacerlos sencillos, capaces de mantenerse siempre conectados a Internet y con bajo consumo de energía eléctrica.Concretamente, "es la base para que el dispositivo funcione", explica César Longa, gerente de Software Empresarial para Latinoamérica de la firma de análisis IDC.
El analista comenta que los sistemas operativos móviles surgieron por la necesidad de funcionalidad y cuando el hardware (el dispositivo) fue evolucionando se crearon programas capaces de soportar todas esas nuevas características.
Indica que desde 1995 inició su adopción en el mundo (en Latinoamérica principió tres años después) y que uno de los primeros equipos que los emplearon fueron los PDA (Asistente de datos personales, por sus siglas en inglés).
FALTA DE LEALTAD
Sin embargo, un reciente estudio sobre el uso de productos y servicios electrónicos de consumo de la consultora de tecnología, Accenture, en el cual se preguntó sobre las preferencias de uso de los diferentes sistemas operativos detalla que en mayor proporción "existe una falta de lealtad a cualquier sistema operativo".
En los resultados se manifiesta que un 66 por ciento de personas consideraría la compra de un dispositivo móvil o de cómputo con un sistema operativo diferente al que utilizan; el 24 por ciento valoraría un cambio y 23 por ciento exploraría la posibilidad de cambio con el fin tener acceso a aplicaciones y servicios innovadores.
