Lucha quiere volver a la familia olímpica

Desesperada por modernizarse para mantener su lugar en las olimpiadas, el deporte de la lucha considera cambios a uno de sus símbolos más tradicionales: su vestimenta.

El presidente interino del organismo rector de ese deporte dijo ayer que la federación negocia con fabricantes la producción de una nueva butarda (maillot o malla) que reduzca la transpiración y diferencie la lucha grecorromana del estilo libre.

Es un indicio de la movilización del deporte para reconquistar su lugar en el programa olímpico después que la junta ejecutiva del Comité Olímpico Internacional la eliminó de los Juegos del 2020.

"Quiero cambiar las butardas para modernizarlas", dijo el presidente interino de la Federación Internacional de Lucha (FILA). "La transpiración es realmente un problema para los luchadores".

Actualmente, los luchadores olímpicos, tanto en grecorromana como en estilo libre, usan butardas (mallas de una sola pieza) azules o rojas.

Lalovic dijo que la FILA se moviliza para incluir a mujeres y luchadores activos en su organismo ejecutivo e introducir cambios en el formato de la competencia y el aspecto del escenario para hacer la experiencia más atractiva.