El gobierno de Chiapas y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) suscribieron una minuta de acuerdos, que acepta las demandas de los docentes y pone fin al conflicto magisterial que inició hace 85 días con un paro y "plantón" en el centro de esta capital en contra de la reforma educativa.
La noche de este miércoles, en la Asamblea Estatal Permanente, los educadores afiliados en las Secciones 7, federalizada y 40 estatal del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación discuten la fecha y las condiciones del retiro total del "plantón en Tuxtla Gutiérrez y la permanencia de una representación magisterial chiapaneca en la ciudad de México, en respaldo a las acciones de la CNTE.
Manuel de Jesús Mendoza Vázquez, secretario general suplente de la Sección 7 del SNTE, aseguró que la firma de la minuta de acuerdos con las autoridades gubernamentales no cancela la lucha ni la resistencia contra "la mal llamada reforma educativa", hasta conseguir que se abrogue, porque constituye un atentado contra la educación, los derechos de los trabajadores y las conquistas laborales.
El entrevistado explicó que otro tema básico de la discusión de la Asamblea Estatal Permanente, es el plan de acción a mediano plazo dentro de la ruta de la "resistencia y la desobediencia" a las leyes secundarias de la reforma educativa.
Indicó que este miércoles, autoridades estatales, encabezadas por el gobernador Manuel Velasco Coello; el secretario general de Gobierno, Eduardo Ramírez Aguilar, y Ricardo Aguilar Gordillo, titular de la Secretaría Estatal de Educación, suscribieron los acuerdos de aceptación de las peticiones del magisterio chiapaneco.
El gobierno estatal admitió las demandas que los docentes plantearon en su pliego petitorio, que comprende inicialmente construir un plan alternativo de educación.
El gobierno de Velasco Coello se comprometió a no realizar ningún tipo de represión, respetar los derechos históricos de los maestros, establecer un programa para atender todas las necesidades de infraestructura de los centros escolares y cumplir acuerdos anteriores.
Autoridades educativas indicaron que, por su parte, los docentes se comprometieron a regresar a las aulas, en una fecha aún por establecer y a la búsqueda de mecanismos adecuados de recuperación de clases perdidas por el paro.
Previo a la suscripción del acuerdo, miles de maestros, padres de familia y estudiantes marcharon del tramo carretero La Pochota, a la plaza central en enésimo rechazo y por la abrogación de la reforma educativa.
