Familia. Para el magistrado presidente del TSJE los 'matrimonios tradicionales' deben fortalecerse.
Aunque en Durango deben reconocerse los matrimonios entre personas del mismo sexo que se lleven a cabo en otras entidades, la sociedad no está preparada para ello, consideró el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Apolonio Betancourt Ruiz.
Luego de la controversia que se generó por la redacción en la Constitución local que abre la puerta para que se defina en la legislación secundaria si se permitirá o no llevar a cabo este tipo de matrimonios en Durango, el entrevistado consideró que esto no sería viable.
Opinó que en la cultura duranguense no está contemplado el matrimonio entre personas del mismo sexo, aunque no negó que haya personas que lo quieran, "nuestra sociedad no está preparada porque los niños simplemente en la escuela tendrían cuestionamientos", señaló al argumentar que su aprobación implicaría "circunstancias sociológicas que no van con la tradición local".
"No es que los diputados o los gobernantes no quieran, sino que se tiene que ver si es un derecho o no, porque hay quien también señala perversión en la unidad de personas del mismo sexo", comentó.
Asimismo, dijo que es respetable cuando se individualiza una unión porque se respetan las decisiones de las personas, "pero como incorporación para promoción es diferente y ahí también tenemos que respetar las tradiciones de las sociedades y también nosotros pedimos que se respete la creencia de uno", declaró.
Dijo respetar los derechos de las personas que tienen una opinión distinta, pero reiteró que, en lo personal, no considera conveniente que se lleven a cabo matrimonios entre personas del mismo sexo en Durango. "Como funcionarios tenemos que hacer lo que la ley establece, pero como persona considero que el matrimonio es hombre-mujer. Se reconoce legalmente, pero hay consecuencias sociales. La gente no lo ve bien", citó.
