A la edad de más de 70 años, la activista contra el SIDA y el HIV Marion Bunch se enfrenta a la enfermedad que se llevó la vida de su hijo en África y más allá.
¿Por qué en África? Porque en la parte meridional de este continente hay miles de casos de sida infantil, poblaciones enteras que han desaparecido como consecuencia de la enfermedad, que siendo prevenible y tratable son multitud de personas sin ninguna información o protección de los sistemas de salud gubernamentales con administradores muy rudimentarios y con escasos recursos.
Para esto Rotary tiene un proyecto muy ambicioso en los que llama "Jornadas de la Salud para la familia", en donde lleva todo un equipo de trabajadoras sociales, voluntarias de salud, enfermeras y médicos para capacitar a estas poblaciones y evitar los contagios nuevos así como enviar enfermos para tratamiento con el apoyo también de la Organización Mundial para la Salud ya que el tratamiento es muy costoso.
Cuando Marion Bunch dice que ella es "sólo una madre", sólo se le puede creer, viéndola moverse entre la multitud de mujeres y niños de esta comunidad de salud reuniéndose, besando la mejilla de un bebé gordito por aquí o intercambiando una sonrisa pícara con un niño por allá.
Pero Marion no es una madre común - y ésta tampoco es una feria de salud común y corriente.
Negociadora incansable y constructora de consenso estratégico con un enfoque de nunca-rendirse, en los proyectos en los que ella es una apasionada consejera de aproximadamente 70 años, en la prevención de SIDA y VIH, como la fuerza determinante detrás de las Jornadas de Salud de la Familia de Rotary. Este esfuerzo, apoyado por Rotary International, llevó los servicios de salud esenciales a cientos de miles de personas durante tres días en mayo en 368 sitios de tres países de África, a medio mundo de distancia del área de la casa de Marion en Atlanta.
"VIVE ROTARY, CAMBIA VIDAS".
Joseignaciom47@gmail.com