John Dee buscaba la verdad.
Primero la buscó en las palabras de los libros, y no la pudo hallar.
Luego quiso encontrarla en los números, y aunque en ellos percibió más verdad que en las palabras pronto supo que tampoco en los números estaba la verdad.
Cierta mañana John Dee vio a una muchacha que iba por agua a la fuente de la aldea. Al punto se enamoró de ella, y ella de él.
Fue entonces cuando John Dee supo que la verdad está en el amor. El amor es la mayor verdad, y a fin de cuentas la única.
¡Hasta mañana!...