El Señor hizo el arco iris.
¡Cuán bellos sus colores! Eran siete, cada uno prodigio del mundo, gala inaugural del cielo. Todas las criaturas se maravillaron al ver aquella curva colorida. Las aves, que entonces eran todas grises, pasaron volando a través del hermoso arco, y pintaron sus plumas con los lucientes tonos.
Adán, hombre común, supo que del arco iris iban a nacer bellas canciones, leyendas encantadas.
Pero llegó un crítico y dijo:
-La verdad, hay más arte en el blanco y negro.
¡Hasta mañana!...