El sabio habló con su hijo:
-Has terminado tus estudios. Dime qué quieres hacer ahora.
Respondió el muchacho:
-Sé todo lo que necesito saber. Quiero entonces un trabajo en el que pueda empezar desde arriba.
-Muy bien -respondió el sabio-. Tu deseo será cumplido.
Fue y regresó trayendo un pico y una pala.
¿Qué es eso? -preguntó el hijo, extrañado.
-Es para que caves zanjas -le respondió su padre-. Cavar zanjas es el único trabajo en el que se comienza desde arriba.
¡Hasta mañana!...