"Cantando la cigarra pasó el verano entero...".
Cuando llegó el invierno no tuvo nada qué comer.
La hormiga trabajó todo el verano.
Cuando llegó el invierno no tuvo nada qué cantar.
Triste es la vida de quien no tiene qué comer.
Triste es también la vida de quien no tiene qué cantar.
Debemos entonces trabajar con medida, a fin de que nos quede tiempo para cantar.
Y debemos también cantar con medida, a fin de que nos quede tiempo para trabajar.
Esto que digo no es una moraleja. La tristeza y el hambre sí lo son.
¡Hasta mañana!...