Mitos de la resaca
El consumo de bebidas alcohólicas se ha vuelto ya un referente obligado de nuestras fiestas decembrinas, actualmente resulta difícil imaginar una reunión social donde no se encuentre presente alguna de estas bebidas, pero como en cualquier aspecto de nuestras vidas también se debe de moderar su ingesta, no importa que se trate de una fiesta.
Tomar una cerveza, una copa de vino o cualquier licor puede ser muy placentero si se realiza de manera moderada, sin embargo, el abuso en el consumo de estos productos nos trae una consecuencia muy conocida: la resaca o también llamada "cruda".
Usualmente se manifiesta con síntomas como el dolor de cabeza, mareos, asco, sed y dolor en algunas extremidades, todas relacionadas al exceso de consumo de alcohol en nuestro organismo horas antes, se trata de un estado que ha despertado desde los remedios más tradicionales hasta procedimientos médicos precisos.
¿POR QUÉ TENEMOS CRUDA?
Cuando el alcohol ingresa al organismo se activa de inmediato una respuesta del órgano como el hígado y el cerebro para procesar esta sustancia (ajena al cuerpo) y desecharla de manera segura, en primer lugar el hígado aumenta de forma considerable su trabajo para eliminar el etanol (de las bebidas alcohólicas), esto ocasiona en el largo plazo otros males como cáncer o insuficiencia, que inclusive puede llegar a afectar otros órganos como el páncreas.
Los riñones pierden gran parte de las hormonas antidiuréticas, esto significa que mientras más alcohol se consuma será mayor el número de líquidos que se pierdan mediante la orina, esto eventualmente nos puede llevar a una deshidratación.
Quienes consumen poco alcohol, o lo hacen con una medida tienen garantizados sólo los primeros efectos de estas bebidas en el organismo, es decir, los que se refieren a la relajación, la sensación de tranquilidad e inclusive una ligera euforia o alegría pueden ser parte de la fiesta sin la urgencia de perder el control y la consciencia.
Una vez que el cerebro ha perdido agua se produce el dolor de cabeza en las horas siguientes, la falta de líquido en el cuerpo humano también causa que los músculos de las extremidades y otras partes del cuerpo se vean afectadas en cuestiones como la movilidad.
Los mareos, náuseas y ascos tienen que ver con el excesivo trabajo de digestión que se le obligó a realizar a nuestro organismo con la ingesta del alcohol, si a esto añadimos otros abusos en la alimentación la situación será mucho más intensa.
Si durante la "borrachera" se cayó en situaciones como el "vómito" la deshidratación será mayor, inclusive de gran riesgo para nuestra salud.
CURAR LA "CRUDA", ENTRE EL MITO Y LA REALIDAD
Los "populares"
⇒ En los mercados, restaurantes de mariscos y otros establecimientos de comida popular se pueden encontrar los llamados cócteles "vuelve a la vida", caldos "restauradores" o con otros términos similares.
⇒ Entre los principales ingredientes de estos alimentos "contra la cruda" podemos hallar ostiones, pulpo, camarones y picante en caldos grandes usualmente, además de aliviar la sensación de sed también nos brindan una carga de proteínas que se pudieron haber perdido la noche anterior.
⇒ Otros remedios vienen de los caldos de pollo, res o similares, lo importante en estos casos es que se incluyan papas, zanahorias y otros alimentos de fácil digestión, todos acompañados de una gran cantidad de picante o jugo de limón.
⇒ Las rebanadas de melón, sandía o toronjas también alivian nuestra sensación de sed, debido a su contenido nutritivo nos ayudan también a sentirnos mejor una vez que transcurren las primeras horas luego de la cruda.
⇒ La realidad es que todos los remedios anteriores sólo atienden a los síntomas de la sensación de sed y otros como el dolor de cabeza y articulaciones, todos derivados de una necesidad urgente de ingresar líquido al organismo.
Comer azúcar, miel, cajeta o algún dulce que tenga gran cantidad de glucosa puede ayudarnos a sentirnos mejor, principalmente antes de que llegue el estado de ebriedad, médicamente puede ser un auxiliar para metabolizar de mejor forma el alcohol, siempre y cuando sólo sean unas cuantas copas.
⇒ Algunas creencias populares establecen que cuando se está en estado de ebriedad se puede "evitar" la cruda al seguir bebiendo, inclusive durante la madrugada y la mañana siguientes al "no dejarla llegar".
⇒ Esto únicamente retrasará los efectos de la deshidratación, convirtiendo la resaca en un golpe todavía más nocivo al organismo cuando llegue finalmente.
Lo que recomienda la medicina
⇒El primer paso para evitar sufrir de más con las "crudas" o resacas es realizar una hidratación inmediata y efectiva, esto se puede lograr mediante la ingesta de electrolitos orales o sueros con electrolitos, se pueden encontrar en cualquier farmacia o tienda de conveniencia.
⇒ Tomar agua, refrescos u otras bebidas deportivas nos ayudarán a aliviar la sensación de sed únicamente, de esta forma persistirán otros síntomas como el dolor de cabeza y cuerpo.
⇒ También se debe de cuidar el consumo de alimentos muy condimentados una vez que se tiene resaca, el sistema digestivo puede contar con daños debido a la elevada ingesta de alcohol.
⇒ Es importante que se haga una reflexión de todos los daños a la salud que llegan con el exceso del consumo de las bebidas alcohólicas, se trata de cuidar el control de nuestro propio cuerpo la diversión no depende de lo que se bebe, sino de quiénes somos y lo que se puede disfrutar con una buena compañía en fechas especiales.