Concretos. Egipto aún sigue dividido sin lograr acuerdos.
Facciones laicas y liberales en el nuevo gobierno egipcio trabajaban ayer domingo para llegar a una solución negociada con los islamistas ultraconservadores en torno a un nuevo primer ministro, en momentos que un economista liberal surge como fuerte candidato al cargo para dirigir el país después que los militares echaron al presidente Mohamed Morsi.
Al tiempo que las negociaciones continuaban, las muestras de fuerza sobre el derrocamiento del primer presidente electo democráticamente en el país estaban lejos de concluir, con cientos de miles de partidarios de ambas partes en las calles el domingo. Las fuerzas armadas desplegaron efectivos en puntos clave en El Cairo en medio de temores de nuevos actos de violencia. La Hermandad Musulmana siguió adelante con su campaña de manifestaciones dirigidas a devolver a Morsi a la presidencia.