El gobierno de Coahuila y el PRI rechazaron un presunto desvío de recursos públicos a la campaña de Enrique Peña Nieto señalado en una investigación del Instituto Federal Electoral (IFE).
El gobernador Rubén Moreira dijo desconocer la investigación pero negó que su administración entregue dinero a campañas políticas.
Moreira dijo que buscarán información sobre el dictamen de la Unidad de Fiscalización del IFE, que detectó el pago de 90 mil pesos del erario estatal para la renta de autobuses que trasladaron a militantes del PRI al cierre de campaña de Peña Nieto el 24 de junio de 2012.
Añadió que harán las aclaraciones necesarias al IFE, pero dijo que "el gobierno del Estado no aporta recursos para campañas".
El presidente del PRI en Coahuila, David Aguillón, dijo que el partido contrató los autobuses a través de la Confederación Nacional Campesina (CNC) y que esta organización "tiene las facturas y los cheques que lo prueban".
El Siglo de Torreón publicó ayer que el IFE detectó que parte del dinero pagado por el PRI para el traslado de militantes al cierre de campaña de Peña Nieto tuvo su origen en el gobierno de Coahuila.
Según el dictamen, que no ha sido aprobado, el gobierno estatal pagó la renta de al menos seis autobuses para los traslados al Estadio Azteca y a puntos turísticos de la Ciudad de México.
El IFE informó la presunta irregularidad a la Auditoría Superior de la Federación para que investigue.
Aguillón afirmó que el proveedor de autobuses de la CNC también ha dado servicio al Gobierno estatal, pero en otros casos.
Dijo que el dictamen omite la aclaración que dio el PRI a este señalamiento.
