La Asociación de la Prensa Extranjera en Alemania (VAP) criticó hoy en un comunicado al Tribunal Superior de Munich sobre la negativa a otorgar acreditaciones a corresponsales en uno de los más grandes juicios contra una célula terrorista neonazi.
La VAP en Berlín consideró que es “inaceptable” que el Tribunal Superior de Munich haya puesto a disposición tan pocas acreditaciones para la prensa extranjera para el proceso de Beate Zschäpe y otros cuatro presuntos miembro de la célula terrorista neonazi NSU.
Dicha célula pasó “desapercibida” para las autoridades alemanas durante 10 años en los que asesinó a nueve extranjeros, ocho turcos y uno griego.
“El proceso es de enorme significado para la prensa extranjera y es incomprensible que se haya tomado tan poca consideración a ésta y en especial a los periodistas de Turquía y Grecia”, escribió la VAP en el comunicado.
La organización pidió al Tribunal Superior de Munich que reconsidere su decisión y que la corrija.
El semanario alemán Spiegel comentó este día en su página web que justamente debido al gran interés de la prensa en el juicio se reestructuraron los asientos en la sala en la que se va a llevar a cabo.
“Entre las víctimas ocho eran migrantes turcos. Pero para el proceso de Munich contra Beate Zschäpe no se otorgó ni un lugar a ningún medio turco en la sala … Ahora los periodistas están tomando medidas respecto al otorgamiento de los lugares”.
Spiegel entrevistó al director del diario turco Sabah, Mikdat Karaalioglu, que tiene su oficina con corresponsales en Hessen y otra en Munich.
Karaalioglu dijo que “no puedo entender que ningún medio turco, pero tampoco de la prensa internacional como el New York Times, la BBC y el International Herald Tribune recibieran acreditación. Solo se le dió a la cadena holandesa RTL”.
La jueza alemana encargada del área de prensa del Tribunal Superior de Munich, Margarete Nötzel, dijo que fundamentalmente hubo dos variantes a considerar para el otorgamiento de lugares, uno de ellos por el orden cronológico de la solicitud del medio, y la otra, una lotería en la que se “rifarían” los asientos.
El Tribunal se decidió por el orden cronológico de las peticiones de acreditación de los diversos medios y la jueza dijo que eso ya lo sabían los periodistas de antemano.
Nötzel declaró además que los periodistas extranjeros se pueden sentar en la sala del juicio, donde están los asistentes en general, en caso de que haya un lugar libre, ya que ya no hay en el sector reservado para la prensa, en un 99 por ciento alemana.
La jueza agregó que las sesiones del juicio no se transmitirán en vivo porque eso lo rechaza el derecho alemán.
Spiegel citó asimismo al periodista alemán Christian Fuch, quien es el autor del libro sobre la NSU titulado “La Célula”, que la decisión del Tribunal puede ser jurídicamente sin mácula pero para los millones de inmigrantes en Alemania el hecho es “un golpe en la cara”.
La siglas NSU de la célula significan Clandestinidad Neonazi. Su existencia fue descubierta por casualidad en noviembre de 2011, después de que de 2000 a 2007 mató impunemente a 10 personas, la última de ellas una mujer policía alemana.
El caso generó mucha atención en Alemania y en el extranjero porque hay indicios de que la célula no pudo actuar sin que la policía la detectara, ya que hay indicios de que jefes policiales y de los cuerpos de seguridad alemanes sabían de su existencia y lo ocultaron.
En el Parlamento alemán hay incluso un Comité de Investigación sobre el caso NSU, en el que se ha interrogado a miembros de la policía y de los cuerpos de seguridad alemanes implicados en el ocultamiento del caso.