Además de comer 12 uvas al pasar de un año a otro, que para la buena suerte y le vaya bien en el 2013, se habla de una dieta que es ideal para desintoxicar el cuerpo y ayudarlo a sanar de un gran número de padecimientos. La dieta de la uva. Este fruto es sin duda uno de los alimentos con más propiedades curativas y altamente eficaces.
Téngase en cuenta que no hay salud sin intestinos limpios, y al ser la uva un potente depurador intestinal, es un elemento que ayuda de forma sorprendente a sanar innumerables padecimientos que derivan precisamente de un intestino en mal estado. La dieta de la uva es recomendada por la medicina natural para aquellas personas que necesitan de forma urgente una depuración profunda de sus intestinos. Hay que recordar que, aunque no se note, a medida que pasa el tiempo muchas toxinas, grasas y materia fecal se queda pegada en las paredes interiores que recubren el intestino, el cual tiene la importante función de absorber los nutrientes que provienen de los alimentos. Si el intestino está sucio, la calidad de absorción es deficiente, y esto se notará en la salud general del cuerpo. Hay que recordar siempre que un intestino limpio es sinónimo no sólo de salud, sino de belleza, pues hará lucir los ojos, piel y cabello, llenos de vida y salud.
Propiedades de la uva: Su potencia depurativa se atribuye fundamentalmente a que es un alimento alcalinizante. Es rica en potasio, el cual controla el equilibrio de los líquidos en el organismo y sus niveles bajos de sodio. Tiene cantidades considerables de vitamina B, que interviene en el metabolismo de las grasas y los hidratos de carbono. Es muy rica en azúcares naturales (glucosa) e hidratos de carbono, lo que la convierte en una fuente de energía natural para aquellos que precisan unos esfuerzos extra como deportistas, niños en época de crecimiento o personas con niveles bajos de azúcar en la sangre.
La uva es extraordinaria para ayudar a sanar diferentes padecimientos cómo: Personas afectadas de enfermedades reumáticas como artritis y gota. Problemas renales. Alergias. Previene y combate estreñimiento (es laxante natural). Colon irritable. Padecimientos del sistema circulatorio como hipertensión, arterioesclerosis, calambres, mala circulación, etcétera. Problemas intestinales (limpia intestinos si se consume la uva sin retirar la piel). Dolores de cabeza ocasionados por una sobre-intoxicación. Propensión a infecciones (cuando el organismo está muy contaminado uno es más vulnerable a contagiarse). Para limpiar y purificar el organismo. El vino tinto, consumido con moderación, es considerado un buen tónico para bajar el colesterol y prevenir el infarto de miocardio. Sin embargo, comer las uvas con piel o exprimidas en jugo, dan los mismos resultados, y sin necesidad de ingerir alcohol, el cual es muy dañino para el hígado.
Por lo que respecta a la dieta de la uva, es importante realizarla cuando el fruto se encuentra en su mayor abundancia, es decir a finales de verano y hasta mitad de otoño y realizarla una o dos veces al mes. En realidad consiste en comer abundantes cantidades de uvas durante el día, ya sea en jugo o enteras, pero con cáscara. Las uvas no deben mezclarse con otro alimento, se deben consumir solas, durante un día. Hay que recordar que las uvas son un gran energético. Esta dieta también es ideal para ayudar a bajar de peso.
Los extraordinarios poderes depurativos de la uva la han llevado a la conclusión de que su consumo puede inhibir el crecimiento de células cancerosas; el extracto de semillas de uva previene la aparición de tumores y cáncer como el de próstata, mama y colon.
Finalmente, en la uva se encuentran vitaminas como la C, E, B1, B2 y B3, aporta también minerales como el calcio, magnesio, fósforo, potasio, sodio, un poco de hierro, cobre y zinc.
La uva es uno de los mejores alimentos desintoxicantes, es ideal para realizar curas con mono dieta, son antioxidantes y combaten los radicales libres. Se recomienda que se coma con piel y semillas, ya que en la piel se encuentran diferentes sustancias antioxidantes.
La uva es especialmente nutritiva y al mismo tiempo cumple funciones limpiadoras y regeneradoras.
Debe de consumirse sola, no como parte de otra comida, debido a su rápida fermentación en el estómago.
Las uvas atenúan las várices, disminuyen el riesgo de flebitis y hemorroides, bajan la tensión arterial, alivia los calambres musculares, aminora las alergias, estimulan las defensas y reducen el estrés y la depresión, aparte mejoran la gota y la artritis.
Así que no sólo debe consumirse a las 12 de la noche del día último del año.