VAN GOGH, FILADELFIA Y LA PSIQUIÁTRICA AMERICANA
La ponencia de la Dra. Lazar mencionada la semana pasada en esta columna, sobre un concepto tan interesante como es el de la neuroplasticidad, estudiado en el laboratorio nos ayuda a reflexionar y a comprender mejor no sólo sobre el valor que tiene la meditación en el campo de la salud mental, especialmente como método terapéutico para manejar la ansiedad, sino también sobre el importantísimo efecto que tienen las palabras y la comunicación verbal en el área de la salud mental. Por mucho tiempo, han existido fuertes dudas sobre el valor y la eficacia que realmente tiene el hecho de sentarse a hablar con un psicoterapeuta en un intento por resolver conflictos intrapsíquicos, a lo largo de un proceso que se puede prolongar por semanas, meses o inclusive años. Y sin embargo, hallazgos como los presentados por esta investigadora en lo que respecta al fenómeno de la neuroplasticidad han sido igualmente confirmados por otros estudios de laboratorio, gracias a los cuales ha sido posible demostrar el hecho de que efectivamente, la psicoterapia como un método terapéutico de interacción verbal trae consigo cambios estructurales en diferentes conexiones neuronales de determinadas áreas del cerebro, algo que anteriormente no se conocía del todo, ni tampoco había sido demostrado hasta ahora. Es así como actualmente, se puede hablar con bastante firmeza y seguridad del valor de la palabra y de la comunicación verbal, sobre todo cuando se trata de diferentes estilos de métodos psicoterapéuticos que busca mejorar la salud mental, y que han sido desarrollados bajo ciertos lineamientos en cuanto a su estructura y orientación encaminados a facilitar cambios benéficos en aquellos individuos que presentan determinados conflictos o trastornos psiquiátricos.
En el presente, existen en nuestro campo cientos de tales métodos de estilos muy variados y que persiguen objetivos similares; sin embargo, dos de ellos especialmente han resaltado en las últimas décadas como métodos muy populares al demostrar su eficacia a través de los años. El primero de ellos es la psicoterapia de corte psicoanalítico o psicodinámico, que tiene sus raíces en el psicoanálisis creado por Sigmund Freud a fines del Siglo XIX y principios del XX, un método que a pesar de múltiples críticas, todavía está vigente y sigue siendo utilizado en muchos países. El otro método de psicoterapia también muy de moda y muy utilizado desde mediados del siglo pasado, es el llamado cognitivo-conductual, en el que como su nombre lo dice, se han mezclado elementos del conductismo y de los aspectos cognitivos del aprendizaje. Se trata de un método creado por el Dr. Aarón Beck, reconocido psiquiatra, profesor emérito de la Universidad de Pennsylvania y presidente del Instituto Beck para la terapia y la investigación cognitiva. En este congreso, tuvimos la excelente oportunidad de contar precisamente con la presencia del Dr. Beck y del Dr. Glen Gabbard, otro reconocido psiquiatra, psicoanalista, profesor de Psiquiatría en la Universidad Médica de Siracusa en el estado de Nueva York, profesor de Psiquiatría Clínica en el Colegio Médico de Houston, y supervisor y entrenador de psicoanálisis en el Centro de Estudios Psicoanalíticos de Houston. Ambos profesionistas tienen una larga y sumamente productiva trayectoria académica tanto como clínicos, académicos, investigadores y por lo mismo autores de numerosos artículos científicos, así como de libros que han sido traducidos a diversos idiomas. Por lo mismo, fue un verdadero privilegio el escucharlos dialogar elocuentemente y reflexionar sobre sus experiencias profesionales personales en una especie de mano a mano sobre el tema de la psicoterapia, cada uno como representante específico de cada una de las corrientes que se mencionaron anteriormente, la psicoterapia de corte psicodinámico y la psicoterapia cognitivo-conductual, que ellos han desarrollado como método de trabajo y de experiencia a lo largo de sus vidas (Continuará).