Salud. Paolo Machiarinni, pionero en esta materia, ya había trasplantado tráqueas a otros pacientes.
Antes de cumplir 4 años de edad, en abril de este año, la pequeña Hannah Warren, internada en el hospital Infantil de Illinois (EU), fue sometida a una cirugía nunca antes practicada, en la cual recibió una tráquea a la medida.
El médico responsable de la operación, Paolo Machiarinni, pionero en esta materia, ya había trasplantado tráqueas a otros pacientes. Pero ahora, en lugar de utilizar la estructura de partes vitales "recicladas" de donadores, construyó una nueva.
Para ello, utilizó un molde de material plástico rígido (PET, como el de las botellas desechables) sobre el cual sembró células-madre de la misma Hannah, quien nació sin ese órgano vital, por lo que se mantenía viva mediante un tubo respirador.
La cirugía de nueve horas resultó exitosa según los médicos, ya que la menor murió meses después, pero esto se debió a complicaciones con el esófago.
Estos nuevos procedimientos de regeneración de órganos basados en "andamios" biológicos y células del propio enfermo definirán el futuro de la práctica de trasplantes, comentó la cirujana Atlántida Raya.
COMO LAS SALAMANDRAS La especialista del Laboratorio de Tejidos del Hospital Infantil Federico Gómez, de la Secretaría de Salud, junto a la genetista Esther López-Bayghen, del Cinvestav, han desarrollado en México órganos "de repuesto" para niños con problemas en vías urinarias mediante estas técnicas de siembra.
Los órganos se han fabricado mediante los mismos protocolos que aplica el cirujano Anthony Atala en el Instituto Wake Forest de Medicina Regenerativa, en EU, con quien ambas han colaborado.
"Ahora planeamos llevar estas técnicas a la regeneración de órganos adultos, dentro de unos meses", adelantó la doctora Raya.
Los equipos de Atala construyen andamios que, a diferencia de los moldes empleados en el reemplazo de tráquea, son de materiales flexibles que se biodegradan una vez que han proliferado suficientes células, sin dañar al organismo hospedero.
El cuerpo humano sólo puede regenerarse en forma limitada, en heridas con una profundidad de un centímetro o menor. Pero Atala está convencido de que al estudiar a especies como las salamandras será posible entender los procesos celulares básicos para luego extender esa capacidad hasta generar extremidades completas.
REGENERACIÓN DE VASOS La extracción de células madre embrionarias de la dermis, clasificadas como multipotentes (pueden originar casi todos los tipos de órganos y tejidos) también puede convertirse en una efectiva alternativa para regenerar órganos y tejidos dañados.
Su desempeño es superior al de las células dermales procedentes de adultos, según lo documenta un artículo que acaba de publicar un equipo italiano de científicos en la revista Cell trasplantation, quienes desarrollaron una técnica para aislarlas.
"En comparación con las células dermales adultas, las fetales mostraron una serie de ventajas como una mayor proliferación tras el aislamiento y la conservación de su potencial de diferenciación", reporta Cinzia Chinnici, colaboradora del equipo.
Las células tomadas hacia las 22 semanas de gestación proliferaron abundantemente tras ser aisladas y cultivadas en laboratorio. Éstas se expandieron de manera homogénea. Por ello, podrían utilizarse para reparar órganos o tejidos dañados, como hoy se hace con la piel en pacientes quemados.
Otra línea de investigación muy promisoria es la que han seguido expertos de la Universidad de Yale, quie nes determinaron, con pruebas en modelos animales, que la "siembra" de tejidos reconstruidos también puede favorecer los mecanismos de reparación del cuerpo.
Y no sólo eso: también han logrado inducir la regeneración de vasos sanguíneos, indispensables para nutrir a los nuevos tejidos y órganos que se forman.
"Con el conocimiento detallado de la vascularización del cuerpo humano y las herramientas de la ingeniería de tejidos podemos insertar piezas biológicas que imiten las funciones de los vasos sanguíneos originales y que puedan crecer dentro de los pacientes", reportó el investigador Chis Breuer.
"Hoy es posible formar cualquier estructura en las vías urinarias", comenta Atlántida Raya.
A la espera, miles de pacientes en el mundo
Aunque en el mundo la tasa de donación de órganos aumentó ligeramente entre 2010 y 2011 -en 5%, para contabilizar un total de 112 mil 600 casos este último año- la cifra apenas es suficiente para cubrir una décima parte de la demanda hospitalaria.
La donación de riñones, los órganos más requeridos, llegó a 76 mil 100 (practicados en 96 países), mientras la de hígados ascendió a 23 mil 700, también durante 2011, según la Red Global de Vigilancia de Donación y Trasplantes.
Los órganos procedentes de donadores cadavéricos sumaron 25 mil 776, esto es poco menos de la cuarta parte del total.
Estas cifras dan cuenta de la urgencia por hallar alternativas médicas que ayuden a reducir la cantidad de pacientes en las listas de espera.
En México, según informes del Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra), los riñones son los órganos más demandados, seguidos por las córneas (clasificadas como tejidos).
En ambos casos, el tiempo de espera oscila entre 24 y 30 meses. Para recibir otras partes vitales, como corazón o pulmones, se requieren períodos de espera aún más prolongados.
