PRIMER ACTO
El otro día pregunté a la directora de un colegio sobre su percepción del bullyng - llamado en español acoso escolar, para no decir violencia extrema- y los medios de control tan discutibles en las instituciones educativas. Digo discutibles por los tristes resultados a la vista.
Quizá mi cara de yo-sé-muy-poco-de-lo-que-me-digas le dio confianza para declararse en franca honestidad y dio su primera respuesta: "eso siempre ha existido, a mí y mis hermanos nos pasó cuando estudiantes". Como sabemos, gracias a las enseñanzas de la Real Academia, la primera acepción de un concepto es la más aceptada. En ese momento, mi inspiración sólo dio para retirarme del sitio con un lamento borincano porque, en honor a la verdad, el sitio era todo un paraíso.
Días después -sí, señor, soy lentona- hice un análisis más profundo de la respuesta a mis inquietudes. Analicé los índices y sus indicios, tiempos verbales, nexos, marcadores textuales, sustantivos, pronombres y adverbios para llegar a la conclusión innegable de que el mensaje fue: "¡ay, señora, no sea exagerada!".
SEGUNDO ACTO
Un jovencito coahuilense, estudiante de secundaria, decidió terminar su vida tras un interminable acoso escolar por parte de sus compañeros de clase. El mensaje que escribió el muchacho dio pie a investigar mejor su circunstancia -demasiado tarde, diría yo- hasta llegar a una recomendación emitida por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos a la Secretaría de Educación Pública y, en lo particular, a la secundaria en donde estudiaba el chico.
Ahora se sabe que el muchacho notificó a compañeros, profesores, directivos y padres sobre la violencia de la que era víctima pero, tal parece, nadie pudo hacer nada pues era menester perder la vida para lograr sus atenciones.
Cuando entrevistan para la radio al delegado de la CNDH sobre el caso, inicia sus respuestas con esto: "Sí se da aquí, pero eso no solamente sucede en Coahuila…".
TERCER ACTO
Un grupo de encapuchados atacó, en Acapulco, Guerrero, a 14 turistas; violaron a seis mujeres extranjeras y los robaron a todos. El caso, sea por masivo o por estar implicado con la embajada española , fue tomado de inmediato por el Gobernador, quien hizo, ipso luego luego, rueda de prensa para dejar clara su postura de esto-no-quedará-en-la-impunidad. Pero antes, por favor, dijo: "…aunque esto pasa en cualquier parte del mundo".
SE CIERRA EL TELÓN
Sí, señor, esto es una tragedia.
dreyesvaldes@hotmail.com