Recién casada, una amiga vivió la invaluable emoción de estar embarazada -es invaluable porque sólo dura nueve meses, mientras que el susirio de cuidar a los chiquillos se queda toda la vida-.
Apenas cumplió un año el pobre vástago, ingresó a la escuela, con libros y todo. Su madre me confesó lo siguiente: "Bueno, hay que esperar a que se case y se vaya".
No voy a dar nombre ni dirección de la mujer. Sé que algunas madres ya estarán llenando la bolsa de objetos para lanzarle a la desalmada. Así que haré una moción a su favor y, si me lo permiten, una apología.
Cierto que la frase resultó burda, pero en realidad engloba el propósito último de la paternidad -en genérico-: prepararlos para que tengan una vida independiente y autónoma. Miren bien, la dudosa madre nunca deseó que fuese abducido por una nave espacial o se teletransportara a otra dimensión, sólo pidió una vida propia para el hijo… y para ella también.
El tiempo que tardan nuestros herederos en alcanzar la autonomía es muy variable, y es directamente proporcional al lapso que tardamos en rehacer una vida propia lo más parecido posible a la individualidad, porque una vez que somos padres nunca seremos sólo nosotros -aunque los marcianos se lleven al hijo-.
Quizá uno de los propósitos más valiosos en escuelas de educación básica y en las familias sea precisamente éste: hacerlos autosuficientes para resolver crisis, porque el ser humano siempre está metido en una. Tomar decisiones, adaptarse, socializar para sobrevivir, sobrevivir a pesar de la socialización; el que ellos no dependan de nosotros para mantenerse con vida será la mejor enseñanza y herencia más valiosa que cualquier otro testamento cargado con bienes inmuebles -que no está por demás como agregado, claro-, porque al sentirse capaces ellos lograrán un patrimonio mejor nutrido que el nuestro.
Esta es la defensa que puedo hacer de mi amiga. Espero que sea válida, por lo pronto le sugerí que se fuera a vivir a una ciudad lejana antes de que usted, enconada señora, averigüe de quién se trata. (No fui yo, eh).
(dreyesvaldes@hotmail.com)
