Sesión. Los legisladores Emilio Gamboa Patrón y Raúl Cervantes Andrade, presidente de la mesa directiva del Senado, conversan durante la sesión ordinaria de ayer miércoles en la Cámara Alta.
El pleno del Senado aprobó con ajustes la reforma en materia de transparencia, en la que dejó a salvo de manera definitiva la autonomía constitucional para el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI) y los órganos estatales de acceso a la información pública, y amplió la lista de sujetos obligados a abrir sus archivos: los tres poderes, los tres niveles de gobierno, sindicatos, partidos políticos, fideicomisos y particulares que ejerzan recursos públicos.
Las bancadas, con excepción del Partido del Trabajo (PT), dijeron en tribuna que la transparencia fortalecida con la autonomía constitucional representa un paso firme en la consolidación del modelo democrático.
La minuta aprobada con 88 votos a favor y seis en contra fue enviada a San Lázaro, donde los diputados sólo podrán analizar cambios de forma, así como adiciones que fijan el mecanismo de controversia en materia de transparencia ante la Corte, que pueden iniciar los órganos autónomos del Estado frente al IFAI.
La Cámara de Diputados también tendrá que aprobar o rechazar el mecanismo para la integración de un pleno del IFAI escalonado, con siete integrantes que cubrirán períodos improrrogables de siete años.
El pleno senatorial validó el Sistema Nacional de Transparencia y Protección de Datos Personales, cuyos elementos principales son dotar de autonomía constitucional al instituto. De la misma forma, los órganos de acceso a la información pública estatales tendrán autonomía.
Aunque la minuta de esta reforma se reenvía a San Lázaro, el hecho de que en el proceso legislativo el cuerpo de modificaciones ha sido aprobado en ambas cámaras federales, equivale a la aprobación definitiva de las partes que no tocó el Senado en su sesión de ayer miércoles.
PT REPRUEBA REFORMA
Los presidentes de las Comisiones de Puntos Constitucionales, Enrique Burgos (PRI); de Estudios Legislativos Primera, Alejandro Encinas (PRD), y de Gobernación, Cristina Díaz Salazar (PRI), destacaron el impacto que tendrá la reforma en el proceso democrático del país.
El grupo del Partido del Trabajo, por medio de su coordinador, Manuel Bartlett, reprobó la reforma al considerar que se trata de una simulación de autonomía al órgano regulador, pues el Ejecutivo podrá vetar nombramientos de consejeros, además que otorga al Consejero Jurídico de la Presidencia de la República la facultad para contravenir las resoluciones del IFAI.
Una de las modificaciones esenciales en la minuta refiere que los órganos autónomos del Estado, como el Banco de México, la CNDH, la Auditoría Superior de la Federación, la Comisión Federal de Competencia y el IFE podrán ir a la Corte en controversia contra resoluciones del instituto.
La senadora del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Arely Gómez González destacó que en el tiempo que ocupó el proceso legislativo de esta reforma participaron voces de la academia y de la sociedad, así como entidades del servicio público comprometidos con las causas a favor de la transparencia y la apertura gubernamental.
El legislador panista Javier Corral Jurado defendió el dictamen al decir: "Hemos ganado lo esencial y lo importante", lo que sigue es el reto de diseñar la legislación de esta reforma constitucional.
Alejandro Encinas, senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en apoyo de la reforma, dijo que el cambio sobre la posibilidad de controversia entre órganos autónomos "fue resultado de negociaciones, no en lo oscurito, sino atendiendo las propuestas de personalidades, académicos, la Red Nacional de Rendición de Cuentas, órganos g arantes de los estados".
