Maltrato infantil. Un bebé de tan sólo tres meses de vida fue brutalmente golpeado por su padre, le ocasionó fractura de cráneo, síndrome del niño maltratado y fractura de piernas.
Un bebé de tan sólo tres meses de vida se encuentra entre la vida y la muerte, tras ser brutalmente golpeado por su padre.
El pequeño Federico fue diagnosticado con fractura de cráneo severa; por lo que su estado de salud se reporta como grave.
Anteriormente, el pequeño ya había sido golpeado por su progenitor, quien le causó fractura en sus piernitas.
TOMARON CONOCIMIENTO
La tarde del pasado viernes, elementos de la Dirección Estatal de Investigación, acompañados por el agente del Ministerio Público del área de Homicidios, se presentaron en el Hospital General de Lerdo para tomar conocimiento de las lesiones que presenta el menor.
El personal médico del hospital informó a las autoridades que el pequeño Federico fue trasladado al hospital por su abuela materna, quien lo encontró en la casa de su hija con las lesiones.
Según la información, el pequeño era cuidado por su padre y abuela paterna, quienes se dieron a la huida.
La abuela materna, al darse cuenta de la situación, trasladó de inmediato a su pequeño nieto al hospital, donde quedó internado, debido a la gravedad de las lesiones.
Además de la fractura de cráneo, el pequeño presenta el síndrome del niño maltratado y fractura de sus piernas en recuperación.
INVESTIGACIÓN
Los voceros de la Fiscalía General del Estado de Durango informaron que ya se integra una averiguación por oficio en torno al caso del maltrato infantil.
Se conoció que se están recabando las evidencias y testimoniales que ayuden a esclarecer este caso.
Se comunicó que desde que el menor fue fracturado de las piernitas, el DIF Municipal debió retirar al menor de sus padres, ya que representan un grave peligro a su desarrollo.
SÍNDROME DEL NIÑO MALTRATADO
De acuerdo a la información recabada con las autoridades, el síndrome del niño maltratado se diagnóstica cuando un menor, niño, desde recién nacido hasta cinco años, es sacudido.
En los niños más pequeños, una sacudida de tan sólo cinco segundos puede provocar este síndrome.
Esta sacudida puede provocar en el menor un hematoma cerebral, inflamación, presión o sangrado del cerebro. Lo anterior es ocasionado por los golpes que recibe el cerebro al golpear con el cráneo.