Luego de perder contra Estados Unidos sus posibilidades de calificar al Mundial de Brasil 2014, los jugadores de Panamá golpearon paredes , otros se tiraron al césped y su entrenador, Dely Valdés, no tuvo fuerzas para ofrecer la conferencia de prensa.
En la zona mixta, ningún jugador de Panamá se detuvo a contestar las palabras de los medios, sus rostros eran muestra del sentimiento que los embargaba, luego de ver escapar el sueño de poder acudir, por primera vez, a una Copa del Mundo.
Panamá dejó escapar en los últimos minutos del partido una victoria que tenía en la bolsa 2-1, que combinada con la derrota de México ante Costa Rica (2-1) le permitía jugar el repechaje ante Nueva Zelanda. Al final, la selección de Estados Unidos terminó por imponerse 3-1 y le arrebató a los centroamericanos esta posibilidad.
Felipe Baloy fue consolado por un futbolista estadounidense al termino del partido. (AP)
