En los próximos días la Corte de Nueva York decidirá si acepta o rechaza una demanda colocada por Petróleos Mexicanos por la supuesta entrega de sobornos a sus funcionarios por parte de las empresas alemanas Siemens y la coreana SK Engineering & Construction, para avalar supuestos gastos por vicios ocultos en un contrato.
Estamos hablando del que se firmó en 1988 para la reconfiguración y modernización de la refinería de Cadereyta ubicada en Nuevo León, cuyas obras se entregaron inconclusas dos años después.
La querella planteada por la paraestatal, primera en su tipo por una firma mexicana de tales características, demanda una indemnización de mil 500 millones de dólares.
El reclamo llegó en reacción a la exigencia de las firmas que con la mexicana Tribasa, en calidad de minoritario, integraron el consorcio Conproca, es decir Consorcio Proyecto Cadereyta, de que se les pagaran 450 millones de dólares por supuestos gastos no presupuestados en el contrato pactado originalmente en mil 618 millones de dólares. Las firmas extranjeras lograron que la Corte Internacional de Arbitraje con sede en París expidiera un laudo a su favor, tras rechazarse un reclamo idéntico de Pemex, éste por daños y perjuicios al utilizarse materiales de segunda y dejar inconclusas las plantas, por 948 millones de dólares.
La resolución del tribunal de la Cámara de Comercio Internacional está aún en proceso de revalidación de los tribunales mexicanos, por más que la paraestatal está de espaldas a la pared al aceptar en el contrato la intervención del órgano en caso de disputas.
La querella, con base a la Foreign Corrupt Practices Act de los Estados Unidos, se sustenta en una investigación realizada en el 2006 por la Securities Exchange Comission contra la empresa Siemens a nivel mundial.
La pesquisa del órgano de supervisión y vigilancia de los mercados de valores en los Estados Unidos habla de pagos por 2.6 millones de dólares a un asesor de negocios para canalizar hacia funcionarios de Pemex a fin de influir en el pago de los reclamos del consorcio.
De acuerdo a una indagatoria alterna de Pemex, el intermediario sería el empresario mexicano Jaime Federico Said Camil Garza y quien otorgó los recursos sería a su vez el que fuera representante de Siemens en México, Hans-Georg Paul.
El primero habría recibido tres cheques por "trabajos de representación" por un total de 28 millones 990 mil 669 pesos. Uno por un monto de 10 millones 500 mil pesos, se fechó el 20 de octubre de 2009.
El segundo cheque al mismo destinatario, por 10 millones 405 mil 185 pesos, llegó seis días después, en tanto el tercero, por ocho millones 36 mil 484 pesos, se cobró al 10 de diciembre del 2009.
Lo inaudito del caso, primero, es que Pemex haya aceptado que el entonces presidente Ernesto Zedillo haya cortado el listón en la agonía de su mandato, lo que implicaba que los trabajos se habían finalizado, cuando las plantas no tenían capacidad de trabajar a un tercio de su infraestructura instalada.
El panorama era tan patético, que para probar una de las plantas se debió llevar petróleo crudo por barco desde el puerto Dos Bocas de Tabasco. Aun así, meses después se firmaría el finiquito de los trabajos, en cuyo escenario se importaron materiales de segunda, al punto de cambiarse dos veces las válvulas requeridas, además de emplear mano de obra gratuita por parte de 400 jóvenes que de esa forma eludían su acuartelamiento por dos años para el servicio militar de su natal Corea.
En la fase previa a la presentación de la demanda de arbitraje, el consorcio Conproca presentó una serie de reclamos por supuestos vicios ocultos en el contrato, cuyo monto total alcanzaba 750 millones de dólares, de los que los árbitros reconocieron sólo 450. La paradoja del caso es que a la entrega del contrato, cuyo costo dejó fuera de la jugada a empresas mexicanas como el grupo ICA, los funcionarios de Pemex lanzaron fanfarrias al vuelo por la ganga conseguida.
Lo barato, dicen, cuesta caro.
BALANCE GENERAL
Abierta la posibilidad de que la reforma energética permita la participación privada en materia de exploración y explotación de yacimientos de petróleo en aguas profundas, las grandes empresas nacionales le apuestan a los contratos de riesgo.
Estamos hablando de la posibilidad de compartir las ganancias derivadas de la actividad, es decir la renta petrolera, lo que implicaría modificar el Artículo 27 de la Constitución.
La alternativa se plantea también en otra área a "liberarse", el gas lutita o shale gas.
La reforma plantea, además, la apertura en refinación, transporte de combustibles y distribución.
COBRANZA A PALOS
A la callada, el Senado aprobó una reforma a las leyes Federal de Protección al Consumidor y para la Transparencia y Ordenamiento de los Servicios Financieros que frena los abusos en que incurren bancos y casas comerciales en el cobro a clientes morosos.
Planteada la iniciativa por el legislador Jesús Casillas Romero, el nuevo marco impide, por ejemplo, llamadas telefónicas entre las 23 y las siete horas; las amenazas de embargo por parte de despachos de abogados; el que se presione a familiares o personas cercanas a los deudores…
La reforma prohíbe el uso de lenguaje obsceno o palabras altisonantes para acosar o amenazar.
Aprobado con 90 votos, el escenario abre el camino para que las deudas se liquiden en el lugar de que se contrajeron, no en los despachos extrajudiciales contratados.
El escenario está aún sujeto a la aprobación de la Cámara de Diputados.
¿TÚ TAMBIÉN, PURI?
Entre las voces que se han manifestado porque bajo el marco de la Ley Federal de Telecomunicaciones se desmantelen los monopolios está la de la diputada Purificación Carpinteyro. De acuerdo a ésta, Telmex y Telcel debían caminar en sendas paralelas. La primera concentra el 90% del mercado en telefonía fija; la segunda el 70 del móvil.
La exsubsecretaria de Comunicaciones señala también la necesidad de dividir a las empresas que manejan televisión abierta y de paga.
REGRESA EL JAI ALAI
En marcha ya la reapertura del legendario Frontón México, el deporte de Cesta Vasca regresa al país con un torneo a celebrarse en Acapulco, con asistencia de pelotaris como Mikel Egiguren, reputado como campeón del mundo.
El espectacular juego conocido también como Cesta-Punta lo promueve el empresario Ramón Neme Aziz.
albertobarrancochavarria0@gmail.com