El Papa recibió en audiencia privada al presidente de Rumania, Traian Basescu, con quien mantuvo un “cara a cara” durante unos 20 minutos. EFE
El Papa Benedicto XVI continuó hoy con buen ritmo sus actividades públicas, recibiendo en audiencia privada al presidente de Rumania, Traian Basescu, con quien mantuvo un “cara a cara” durante unos 20 minutos.
Poco antes de las 11:00 hora local (09:00 GMT) el mandatario y su delegación, compuesta por 13 personas, llegaron hasta el Palacio Apostólico.
El líder católico recibió a su huésped en la sala del Troneto, la antecámara de la biblioteca personal del pontífice.
“¡Bienvenido! ¡Bienvenido!”, fueron las palabras con las cuales Joseph Ratzinger dio la bienvenida al presidente, quien le agradeció por haberle concedido la audiencia. Ambos hablaron en inglés.
Inmediatamente después ambos ingresaron a la biblioteca, se sentaron frente a un gran escritorio. Tras la conversación privada, se pasó a la presentación de la comitiva rumana.
Luego intercambiaron regalos. El mandatario entregó al líder católico un voluminoso libro realizado sobre papel hecho a mano sobre la historia de las iglesias realizado bajo la supervisión de la Iglesia Ortodoxa Rumana.
Por su parte Benedicto XVI entregó una medalla de su pontificado, encuadrada en una filigrana de madera. Los periodistas presentes refirieron que el Papa participó en la audiencia de con una actitud normal, como si no hubiese renunciado.